Cannes, 12 may (dpa) – Quiencrea que «El ángel» es un biopic sobre Carlos Robledo Pucho, considerado el mayor asesino en serie en Argentina, se equivoca. La película que Luis Ortega estrena en el Festival de Cannes se inspira en el delincuente pero contiene sobre todo elementos biográficos del propio realizador argentino.
«Siempre sentí admiración por los delincuentes y nunca supe por qué», dijo hoy Ortega en entrevista con un reducido grupo de periodistas. «De chico siempre quise ser un delincuente», dijo.
«Yo admiraba mucho ese mundo y nunca tuve lo que hay que tener para ser un hombre de esas características, pero hice muchos esfuerzos durante muchos años para formar parte de ese mundo marginal», agregó el cineasta, que sorprendió con la franqueza con la que habló de su pasado adolescente, cuando se dedicaba a robar todo tipo de artículos, entre otros, armas.
«El ángel», que se muestra en la sección Una Cierta Mirada, la segunda en importancia del certamen francés, es una aproximación al asesino en serie argentino, pero muy libremente ficcionada por su compatriota que, por ejemplo, evita incluir las violaciones de las que también se acusó a Robledo Puch, que en los años 70 mató a más de una decena de personas y cometió más de 40 robos.
«Los directores siempre hacemos eso. Siempre es algo biográfico. Uno no puede escribir algo que no sepa», dijo el realizador, que nunca conoció a Robledo Puch, el preso que más tiempo ha estado entre rejas en Argentina.
«Seguramente no tenga mucho que ver el personaje de la película», añadió. «Me dio un poco de culpa porque sentí que estaba explotando la figura de alguien que estaba preso y no se podía defender, pero en la película no lo acusamos de nada, sólo usamos su nombre y el atractivo que puede tener», admitió.
Protagonizada por el debutante Lorenzo Ferro (hijo del actor Rafael Ferro) en el papel de asesino con rostro angelical, la cinta cuenta además con Chino Darín, el hijo de Ricardo Darín, como compañero de robos. Cecilia Roth y el chileno Luis Gnecco encarnan a los padres del asesino, mientras que Mercedes Morán se pone en la piel de la madre de Darín.
«El personaje de la madre del Chino Darín está inspirado en la madre de un amigo mío de la infancia que nos llevaba a robar, a meternos dentro de casas, a romper cristales, a tirar bombas de humo dentro de los cines y los evacuaban. Cosas que para mí eran muy normales, hasta que fui grande y dije: ‘No eran muy normales'», relató el director.
«Era una mujer muy sensual con nosotros de una manera poco ortodoxa y con el tiempo me di cuenta que eso tiene que ver mucho con quién soy», añadió Ortega, hijo del cantante argentino Palito Ortega y la actriz Evangelina Salazar.
«Robábamos armas y todo lo podíamos, porque tenía que ver con la emoción de robar. No teníamos necesidad de robar», recordó el realizador sobre aquella época en plena adolescencia, cuando vivía en Estados Unidos.
Esta no es la primera vez que el cineasta incursiona en el mundo del hampa. En la aplaudida serie «Historia de un clan» ficcionó la vida de una familia real que en los años 80 que se dedicaba al secuestro y la extorsión en Buenos Aires.
En «El ángel» Ortega muestra a un asesino aparentemente sin empatía con los demás, que no roba con el objetivo de conseguir un botín, sino por el placer de atreverse a hacer lo que a él le apetece.
Sin ser un estudio del mal, Ferro y Darín construyen en «El ángel» una pareja de delincuentes al estilo «Bonnie and Clyde». «De alguna manera hacer películas era lo más parecido a ser un delincuente», afirma Ortega, que de momento se lleva un buen aplauso de Cannes.
Por María Luz Climent Mascarell (dpa)