Tiflis (Georgia), 19 dic (dpa) – Alemania firmó hoy un acuerdo con Georgia para aumentar la cooperación en migración con medidas tales como facilitar la reinserción de los migrantes georgianos cuyas solicitudes de asilo sean rechazadas.
La ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, firmó el acuerdo con su homólogo, Vakhtang Gomelauri. Allí establecieron, entre otras cosas, aumentar la campaña de información «sobre las escasas posibilidades de éxito de las solicitudes de asilo de los ciudadanos georgianos en Alemania».
«Necesitamos urgentemente mano de obra en muchas áreas, algo similar ocurre en Georgia», dijo Faeser, tras firmar el acuerdo. «Hoy también se demuestra que se necesita tiempo para cerrar acuerdos de migración».
Según las autoridades germanas responsables de las deportaciones, Georgia ya está cooperando relativamente bien a la hora de readmitir a sus ciudadanos obligados a abandonar Alemania.
Desde el punto de vista del Ministerio alemán del Interior, la decisión de la semana pasada de la Cámara Alta del Parlamento (Bundesrat) de clasificar a la antigua república soviética como «país de origen seguro» fue un paso importante, ya que entonces las demandas contra la denegación de asilo no tienen efecto suspensivo.
Esto significa que los afectados pueden emprender acciones legales, pero igualmente pueden ser deportados de Alemania antes de que finalice el procedimiento judicial.
Según el citado ministerio, menos de 9.000 georgianos solicitaron asilo en Alemania entre principios de enero y finales de noviembre. Además, en los últimos tres años, menos del uno por ciento de los solicitantes georgianos obtuvo el estatus de asilo.
El éxodo de la mano de obra no es lo deseado expresamente por el Gobierno de Tiflis. El acuerdo que se ha firmado ahora solo prevé procesos simplificados para trabajos temporales, ofertas de trabajo alemanas para los georgianos con empleos precarios en el extranjero y un mayor intercambio de estudiantes, becarios e investigadores.
La posibilidad de que algunos migrantes de Georgia viajen a Alemania para recibir un mejor tratamiento médico fue refutada por el ministro Gomelauri. El funcionario sostuvo que en su país se puede recibir el mismo tratamiento que en Alemania o Francia.
En los primeros once meses de este año, más de 304.000 personas -alrededor de un 60 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior- solicitaron asilo en Alemania por primera vez.
Como Alemania está acogiendo al mismo tiempo a cerca de un millón de refugiados de guerra procedentes de Ucrania, que no tienen que solicitar asilo, la ministra Faeser se esfuerza por reducir el número de entradas no autorizadas y por expulsar a personas que ya han sido obligadas a abandonar el país por las autoridades.
Las medidas para lograr este objetivo incluyen controles temporales adicionales en las fronteras terrestres con la República Checa, Polonia y Suiza.
El hecho de que cientos de georgianos presenten cada mes en Alemania solicitudes de asilo infundadas en parte supone una carga adicional para el Gobierno. Sin embargo, los principales problemas están en otra parte.
El acuerdo entre la Unión Europea y Turquía, que durante un tiempo redujo en gran medida la migración irregular de refugiados de Siria y Afganistán ya no funciona y, por tanto, debe renegociarse.
Hay varias razones por las que muchas personas de Siria, Afganistán, Irak y, cada vez más, ciudadanos turcos buscan protección en Alemania. Una de ellas es que un número relativamente grande de sus compatriotas ya viven en Alemania.