Para realizar cualquier tipo de cultivo, siempre es necesario tener en cuenta un factor imprescindible como lo es el clima, ya que, la mayoría de los vegetales o frutas deben ser sembrados a unas temperaturas específicas porque, de lo contrario, serán cosechas inútiles que no darán resultado.
Hoy en día, muchos empresarios agrícolas necesitan asesoramiento con respecto a ciertos cultivos. Tal es el caso del cultivo del olivo, el cual, debe realizarse siguiendo unos parámetros determinados y bajo unas condiciones climáticas específicas.
Para este tipo de cultivo o para simplemente encontrar soluciones de cultivo de cualquier otra índole, la empresa “Suez Agriculture”, es la mejor en materia de asesoramiento de cultivo para empresarios agrícolas.
En esta compañía obtendrás ayuda en la elección del cultivo más adecuado según la climatología y el agua disponible, mediante un exhaustivo análisis de la demanda del mercado para maximizar los ingresos, disminuir los riesgos asociados a la producción agrícola y garantizar la sostenibilidad.
En pocas palabras, en Suez Agriculture se encargarán de tres aspectos fundamentales: realización de estudios para la elección del cultivo más adecuado según las condiciones de la zona, asesoramiento en el diseño del sistema de cultivo y finalmente la elección del diseño de equipo de riego y fertiirrigación según el sistema y el tipo de cultivo.
De todas formas, a continuación, te daremos algunos datos interesantes que te pueden ser útiles a la hora de realizar un cultivo de olivo.
El Olivo en estado silvestre se llama “Acebuche” y proporciona unas aceitunas pequeñas y con poco rendimiento en aceite, por lo que su cuidado y labor agrícola a lo largo del año incrementará la cantidad y tamaño de las aceitunas recogidas y por lo tanto del aceite generado.
El olivo es un árbol rústico, uno de los frutales que más toleran la salinidad, que admite un clima semiárido y suelos pocos fértiles y superficiales; pero es preciso tener en cuenta que en estas condiciones la productividad es baja. La experiencia demuestra que, cuando el olivo se cultiva en suelos fértiles, se le aporta la pluviometría necesaria y se amplía la densidad de plantación, el aumento de la producción es bastante considerable.
Aunque el olivo se cultiva desde hace miles de años, en la actualidad el agricultor se interesa por nuevas técnicas de plantación y cultivo. Desde hace unas décadas las labores de agricultura del olivo se han mecanizado solo parcialmente, ya que, existe todavía una gran cantidad de labores que se realizan de forma manual igual que hace cientos de años.
En la actualidad se presta atención al diseño de las plantaciones, al cuidado de la erosión de los suelos,al mantenimiento de la humedad del suelo y a la aportación de fertilizantes y fitosanitarios al olivo.
Siguiendo estos parámetros, se puede decir que el cultivo del olivo se basa en cinco premisas que se consideran fundamentales: una poda proporcionada con la edad, la variedad y el estado vegetativo, la realización de labores en el terreno o el mantenimiento del suelo por métodos sin laboreo, la fertilización del suelo: por vía foliar (hojas), por fertilizantes o por la combinación de ambas, los diferentes controles fitosanitarios y el riego de plantaciones en zonas con déficit de pluviosidad.