(EP) -La alcaldesa de Gijón, Ana González (PSOE), ha abogado este lunes por que, ahora que se están haciendo planes específicos desde el Estado y Gobierno del Principado, el Ayuntamiento perfilara algo dirigido a pequeños «subsectores olvidados».
Así lo ha indicado, en declaraciones a los medios de comunicación tras la toma de posesión de la nueva secretaria municipal, a los que ha dado de ejemplo los feriantes o agencias de viajes.
«Yo estoy preocupada», ha reconocido la regidora gijonesa sobre la situación de estos subsectores que, según ella, se han quedado fuera de las ayudas dadas para cubrir pérdidas por el impacto de las medidas de la COVID-19.
La alcaldesa ha animado, en este sentido, a ser conscientes de que lo están pasando «aún peor», con relación a que siempre se tiende a pensar en comercio y hostelería como los más afectados, cuando otros también lo están.
Algo que ha relacionado con el debate que se está teniendo en el marco de la concertación social acerca de la propuesta del Gobierno local de poner en marcha unos bonos de ayuda al consumo, donde la Administración local abonaría una parte de las compras.
Estos bonos tendrán distintas cuantías, ya que, según palabras de la alcaldesa, no es lo mismo irse a tomar un café que a cenar o ir a un espectáculo. Distinta cuantía, además, porque se van a dirigir a distintas realidades, según ella.
A este respecto, ha aludido a la diferente visión que hay entre quien conforma el acuerdo de concertación social, si bien cree que poco a poco se van limando asperezas y la medida va ganando adeptos, aunque haya quien cree que el pacto local no sea el marco adecuado.
González ha incidido en que ayudas a los sectores más afectados por la pandemia ya las hay, pero estas exigen unos requisitos que igual no todo el mundo puede cumplir.
A su modo de ver, son requisitos «muy estrictos». Sin embargo, el sistema de bonos puede llegar a todo el mundo y a sectores que lo tenían más complicado para acceder a una ayuda.
Es por ello que ha considerado que la idea de los bonos es positiva y «muy redistributiva», ya que llega a mucha gente. Una medida que ya se ha puesto en marcha en otros lugares, gobernados por distintos signos políticos.
La alcaldesa ha indicado que con la Renta Social Municipal había 300 comercios adheridos y con las recientes ayudas directas aprobadas más de un centenar. Sin embargo, con los bonos el efecto económico es «multiplicador» porque a lo que pone el Ayuntamiento se suma lo que pone el consumidor.