(Europa Press) – El Ministerio del Interior alemán ha designado a 91 islamistas retornados de Siria e Irak como «amenazas» para la sociedad, y otras 66 personas han sido clasificadas como «objeto de interés» por su presunta relación con casos de radicalización en todo el país hasta el 28 de septiembre de este año.
Las autoridades alemanas emplean la designación de amenaza a aquellas personas que considera capaces de llevar a cabo delitos de sangre por motivos ideológicos o políticos, mientras que sobre los objetos de interés recae la sospecha de proporcionar apoyo logístico a estos posibles ataques.
El pasado mes de junio, el Gobierno alemán tomó constancia de 61 islamistas descritos como amenazas, aunque se refirió a ellos como combatientes de la organización terrorista Estado Islámico.
En términos generales, la Policía Federal de Alemania tiene conocimiento de 355 combatientes islamistas que regresaron al país desde Siria e Irak desde 2012.
De los aproximadamente 1.070 que se marcharon a combatir, 266 han fallecido. Además, hay 109 islamistas que viajaron desde Alemania detenidos en Siria y otros 10 en Irak.