Si hacemos caso de los datos proporcionados por el Observatorio Español de la Economía Social y del Trabajo Autónomo, el año 2024 terminó con una muy buena noticia para el colectivo de trabajadores por cuenta propia: más de 42.000 nuevos autónomos se dieron de alta, llevando la cifra total hasta los 3,4 millones, el nivel más alto registrado al cierre de un año en España. Un crecimiento que se vio impulsado principalmente por la actividad en sectores de alto valor añadido, evidenciando una apuesta creciente por perfiles más cualificados y especializados.
En esta realidad de crecimiento, es más importante que nunca contar con herramientas y normativas que faciliten el trabajo del autónomo y de otros actores económicos, eliminando barreras innecesarias. Y aquí es donde entra en escena la Ley Crea y Crece, que, entre otras medidas, apuesta por la factura electrónica obligatoria como un paso ineludible hacia la modernización, la transparencia y la mejora en los pagos.

¿Pero, qué es exactamente una factura electrónica?
¿Te acuerdas cuando las facturas eran hojas impresas, firmadas a boli y guardadas en carpetas con nombres como «A COBRAR URGENTE»? Pues eso ya es historia. La Ley Crea y Crece ha llegado pisando fuerte, con ganas de digitalizar de una vez por todas el mundo empresarial español, siendo uno de sus ases, la factura electrónica obligatoria.
En contra de lo que mucha gente piensa, la factura electrónica no es simplemente una factura en PDF que envías por email, más bien se trata de una factura estructurada en un formato digital que puede ser leída, procesada y registrada automáticamente por sistemas informáticos. No hablamos de algo visual, sino de un archivo con datos organizados para facilitar su tratamiento. Y no te preocupes si esto suena a otro idioma, en la actualidad existen herramientas que hacen todo ese trabajo por ti. Si deseas comprobarlo por ti mismo, desde aquí te invitamos a visitar la página de Cegid, una plataforma segura y confiable que cuenta con una amplia trayectoria en el sector.
¿En qué consiste la Ley Crea y Crece?
Crear una empresa y hacerla crecer es el sueño de muchos emprendedores, pero también es indispensable para que la economía de un país avance, sea más productiva y esté mejor preparada para los baches del camino.
En España, las pequeñas empresas y los autónomos son la gran mayoría: representan más del 99 % del tejido empresarial. Pero ¿cuál es el problema? Que muchas veces no lo tienen nada fácil. Crear un negocio puede ser caro y complicado, y crecer aún más, por culpa de papeleo, normas confusas, pagos tardíos y dificultades para acceder a financiación.
Y claro, cuanto más pequeña es una empresa, más vulnerable es. Si se retrasan los pagos o surgen imprevistos, no tienen tanta capacidad para aguantar el tirón. Esto frena su crecimiento, la creación de empleo y, al final, también afecta a toda la economía.
Por eso nació la Ley 18/2022, de Creación y Crecimiento de Empresas, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia impulsado por la Unión Europea. ¿Su objetivo? Hacer más fácil emprender y crecer:
- Reduciendo barreras administrativas.
- Fomentando la digitalización (como con la factura electrónica).
- Mejorando el acceso a financiación.
- Luchando contra la morosidad.
- Y creando un entorno más ágil y competitivo para todos.
Esta ley crea y crece para autónomos y para todos los operadores económicos que emitan facturas, sin importar el tamaño, forma parte de un esfuerzo más amplio por modernizar nuestra economía, adaptarla a los nuevos tiempos y darle a las empresas, sobre todo a las más pequeñas, las herramientas que necesitan para convertirse en verdaderos motores de empleo, innovación y desarrollo.
¿Cuándo entra en vigor?
Aunque ya entró en vigor el 19 de octubre de 2022, 20 días después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), algunas de sus medidas clave (como la factura electrónica obligatoria) tienen un calendario de aplicación progresivo, dependiendo del tamaño de la empresa y de cuándo se apruebe el reglamento técnico necesario. Dicho de otro modo, la ley ya está en marcha, pero el «reloj» de la factura electrónica obligatoria aún no ha empezado a correr hay que esperar a la orden ministerial que aprueba el reglamento. Lo que sí se sabe:
- Empresas con facturación superior a 8 millones de euros al año: tendrán 1 año desde la aprobación del reglamento técnico (que aún está en proceso).
- Resto de empresas y autónomos: tendrán 2 años para adaptarse a partir de la publicación de ese mismo reglamento.
Como puede observar, aún dispones de margen para elegir la herramienta que vas a usar.
¿Y qué se gana con todo esto?
Aunque al principio parezca un quebradero de cabeza, la factura electrónica trae muchos beneficios:
- Ahorro de tiempo: se acabó buscar una factura perdida entre los correos o revisar si la has enviado.
- Mejor control de pagos: puedes ver cuándo la reciben, cuándo la abren y cuándo la aceptan.
- Adiós a “es que no me llegó la factura”: todo queda registrado.
- Mayor profesionalidad: tu negocio se ve más moderno, más eficiente.
- Reducción de la morosidad: al digitalizar, se puede controlar mejor quién paga y quién se retrasa.
- Más transparencia fiscal.
- Menor impacto medioambiental: menos papel, menos impresoras, menos tóner.
En definitiva, a pesar de que la factura electrónica va a ser obligatoria y a primera vista pueda parecer un auténtico engorro, no conviene olvidar que también va a resultar una gran ayuda. La Ley Crea y Crece no viene únicamente a exigir cambios: viene a hacer más fácil, eficiente y justo el día a día de autónomos y empresas. Y aunque cambiar cuesta, en este caso se trata de una buena causa.
Así que despídete del papel y del “ya te la mando esta tarde”. El nuevo mundo de las facturas es digital, rápido y más seguro.