El Gobierno de Asturias ha iniciado la exhumación en la fosa común de La Lloba, en Castrillón, como parte de su compromiso con la memoria democrática. Han participado autoridades, expertos y familiares.
El Gobierno de Asturias, a través de la Consejería de Ordenación del Territorio, Urbanismo, Vivienda y Derechos Ciudadanos, ha comenzado los trabajos de exhumación de la fosa común de La Lloba, ubicada en el pueblo de Carcéu, en Castrillón. El Principado financia esta actuación como muestra de su compromiso con la recuperación de la memoria democrática.
En el inicio de las labores han participado la viceconsejera de Derechos Ciudadanos, Beatriz González Prieto; la directora general de Memoria Democrática, Begoña Collado, el catedrático de Arqueología de la Universidad de Oviedo y director del grupo Arqueos, Avelino Gutiérrez, y familiares de posibles víctimas, además del alcalde de Castrillón, Jesús Eloy Alonso, y otros miembros de la corporación municipal.
Principios de verdad, justicia y reparación
Prieto ha destacado que esta actuación ha sido la segunda de este año, tras la realizada en Santianes de Molenes (Grado) y la sexta de la legislatura. “Creo que va a ser muy importante, porque hay muchas familias que llevan muchísimos años esperando que llegue este momento, y porque nos permite cumplir con los principios de verdad, justicia y reparación, así como reivindicar la historia ante la validación que estamos viendo por parte de gente muy joven del régimen franquista”, ha señalado durante el acto. Para Prieto, este hecho es “motivo suficiente” para intentar hallar los restos de personas asesinadas.
La viceconsejera ha defendido la relevancia histórica y social de este tipo de trabajos y la necesidad de mantener viva la memoria frente a los intentos de blanquear la dictadura que, a su juicio, responden “al abandono del conocimiento de la historia en los centros educativos”.
“¿Cómo es posible que, con las barbaridades y brutalidades del franquismo, haya gente que diga que entonces se vivía mejor? Esto es una demostración palpable de que eso no es cierto”, ha señalado.
Investigación arqueológica y compromiso institucional
Además, la viceconsejera ha reafirmado el compromiso del Ejecutivo autonómico con las familias afectadas: “Para el gobierno, lo principal es intentar dar respuesta a las familias. Es un día muy importante para mucha gente y también para el Principado, que va a seguir apostando por poner los fondos suficientes para colaborar con la Universidad de Oviedo, a través del Vicerrectorado de Extensión y del grupo Arqueos, para los trabajos de exhumación en todas las fosas en que sea posible”.
Avelino Gutiérrez, director del grupo Arqueos, que se ha encargado de las labores de exhumación, ha explicado que la fosa de La Lloba se encuentra en una antigua posición fortificada republicana que nunca llegó a entrar en servicio, pero que podría haber sido utilizada como lugar de ejecuciones tras la caída del frente norte. Según ha apuntado, en la trinchera podrían hallarse entre 24 y 28 víctimas.
Gutiérrez ha añadido que existen otros posibles enclaves en el entorno de Avilés, desde Cabo Peñas hasta Verdicio, y ha subrayado la importancia de continuar con la investigación y la documentación para ofrecer respuestas a los familiares.
Entre los asistentes al inicio de los trabajos se hallaban parientes de las posibles víctimas, como las hermanas Laura y Georgina González, quienes han explicado que son dieciséis las familias que se han unido para tratar de esclarecer la verdad sobre el paradero de sus antepasados. “Hay gente en Francia, en Alicante y en Canarias pendiente de esto. No todos pueden estar aquí, pero están todos pendientes”, ha precisado Laura González.