Wiesbaden (Alemania), 31 mar (dpa) – El número de quiebras de empresas cayó en Alemania el año pasado a su nivel más bajo desde 1999, a pesar de la pandemia de coronavirus.
Los tribunales alemanes informaron de 15.841 insolvencias de empresas, un 15,5 por ciento menos que el año previo, según anunció hoy en Wiesbaden la Oficina Federal de Estadística.
Las dificultades económicas de muchas empresas no se reflejaron en estas cifras porque la obligación de solicitar la quiebra fue suspendida durante la crisis.
La obligación de presentar las empresas en cesación de pagos, que ya entró nuevamente en vigor desde octubre de 2020, ha tenido hasta ahora un efecto leve, según el informe de la Oficina de Estadística, en parte por el tiempo de tramitación de los tribunales.
Para las empresas sobreendeudadas, la obligación de denunciar su situación se suspendió hasta finales de diciembre. Esto seguirá aplicándose hasta finales de abril para aquellas empresas que tengan pendiente el pago de las ayudas estatales previstas desde el 1 de noviembre.
Normalmente, la solicitud de insolvencia debe presentarse a más tardar tres semanas después de que se haya producido un motivo de insolvencia como el sobreendeudamiento o la imposibilidad de afrontar los pagos.
Los expertos habían temido inicialmente que el número de quiebras de empresas aumentara este año debido a la crisis del coronavirus.
Los reclamos probables de acreedores ascienden a algo menos de 44.100 millones de euros (51.800 millones de dólares). Un año antes, este monto era significativamente menor, unos 26.800 millones de euros.
En 2020 se declararon insolventes empresas económicamente más relevantes que el año previo. El caso más espectacular fue la quiebra presuntamente fraudulenta del proveedor de servicios financieros Wirecard.