(dpa) – ¿Qué es un dandy? Básicamente alguien que no sólo se viste bien cuando tiene una cita. Es más, suele vestir muy bien, llamativamente bien, sin ser por otra parte exagerado. En la actualidad, los dandys se caracterizan por revivir la moda de 1950 y 1960, pero de un modo astuto: nada de lo que llevan está vinculado a una moda de todos los días.
«Su interés es llamar la atención visualmente y ser un poco el centro de escena», observa el crítico de modas Bernhard Roetzel. Los hombres pueden llevar traje, chaleco y hasta sombrero.
Ese look «retro» contrasta con la tendencia del estilo «casual» que tanto se ve hoy. Un verdadero dandy nunca tendría un anorak en el armario. Además, el dandy piensa su look de pies a cabeza, pero «sin que se vea el esmero que pone en eso», advierte Andre Bangert, que trabaja en una revista de modas masculina.
El cuadriculado, que se ve bastante desde hace varios años, es un estampado ideal para los dandys. El «glen check» y el pata de gallo también son diseños perfectos para los trajes. «Los trajes en azul oscuro con una tenue línea rosa o verde claro» son ideales para un dandy con clase, apunta Roetzel.
El corte de los trajes suele ser más bien amplio, tal como se estilan ahora, muy a diferencia de la moda al cuerpo, ajustada, que se ve en otro tipo de prendas. El brocado, el terciopelo y el corderoy hacen que cualquier modelo de pantalón atrape las miradas. «Son texturas ricas y de profundidad a nivel visual y eso les da un gran valor», explica Bangert. Algo que el dandy sabe apreciar y quiere irradiar.
Una buena camisa nunca puede fallar, pero como alternativa en caso de que la temperatura esté algo más baja viene bien un jersey de cuello, siempre de alta calidad, sea en mohair, alpaca o cachemira. «Por lo general las prendas son de lana de s140», explica Gerd Müller-Thomkins. El «s140» es sinónimo de telas de alta calidad. Cuanto más alto el número, mayor es la calidad. Un traje bueno no debería estar por debajo de los s120.
Sobre el traje el dandy suele llevar un abrigo tweed hasta la rodilla, en el corte clásico Chesterfield, que en realidad se está viendo como la prenda «it» del 2019. El calzado hace juego con el resto del look: botas Chelsea, zapatos Oxford o Spectators en dos colores como blanco y negro o incluso en combinaciones de colores que saltan a los ojos, como verde y rojo. Lo crucial es que el cuero y las costuras sean de muy buena calidad. Según Müller-Thomkins, las costuras es lo que indica «la mejor calidad» y la duración que tendrá el calzado.
Si eres muy atrevido, hasta puedes combinar calzado de colores con calcetines fuera de lo común, algo muy requerido hoy.
El sombrero y los tiradores son accesorios clásicos. «Los tiradores deben estar a la altura de las pinzas frontales del pantalón. Eso ayudará a que la caída de las pinzas sea mejor», observa Roetzel. El broche de la corbata, los gemelos o un reloj de bolsillo serían otros accesorios que llamarían la atención. Otro detalle que no puede faltar: una buena barba.
Y no tiene por qué ser un look muy costoso. En muchas tiendas, ferias de prendas usadas o foros de intercambio en Internet se pueden encontrar piezas originales o extravagantes y, gracias a una tendencias generalizada por lo retro, las nuevas colecciones también ofrecen cosas que se adaptan a este estilo y tal vez no son excesivamente costosas.
«Para el público general suelen fabricarse modelos con cuadriculados y colores más discretos», nos tranquiliza Volker Feyerabend, profesor de diseño de modas en una escuela de Hannover. La ventaja es que el «look dandy» de ese modo se lleva mejor con lo que podemos vestir todos los días.
Bangert, asesor de modas, nos da un buen consejo para sumarnos a esta moda sin exagerar: quedan muy bien unos jeans combinados con un saco de corderoy o calzado deportivo combinado con una camisa, chaleco y pantalones pinzados delante. El resultado es relajado y a la vez muy a la altura de la moda.
Pero no dejes de probar las combinaciones más atrevidas, que al fin de cuentas eso es lo que define a un dandy: que se divierte con las modas.
Por Jule Zentek (dpa)