(dpa) – La pandemia de coronavirus está lejos de haber terminado, pero los museos alemanes ya están reuniendo objetos que reflejan el impacto de la pandemia y documentan la vida en el aislamiento.
Mascarillas hechas en casa, estantes vacíos en los supermercados, gente aplaudiendo en los balcones: «La historia se está escribiendo ahora mismo», enfatizan los curadores del Museo de la Ciudad de Wolfsburgo, uno de los muchos que en toda Alemania ya está reuniendo material relacionado con los meses de emergencia sanitaria y confinamiento.
«Los museos tienen un recurso muy importante: su colección», afirma Thomas Schwark, director de los Museos de Historia Cultural de Hannover, y subraya que estos objetos serán nuestros referentes cuando intentemos procesar lo que ocurrió durante la pandemia.
El Museo Histórico de Fráncfort también está pidiendo a la gente que envíe material que documente el coronavirus, desde grabaciones de audio y vídeo hasta fotos, objetos e historias.
«¿Cómo recordaremos en Fráncfort la pandemia del coronavirus? ¿Qué ha sido lo más importante para nosotros durante la crisis?», reza un reciente llamamiento del museo a donar objetos.
Varios museos de Berlín y Colonia también quieren preservar los recuerdos y están buscando fotografías, artefactos y relatos relacionados con la vida urbana. «Queremos capturar la vida con el coronavirus para las generaciones futuras», publicó el Museo de la Ciudad de Colonia en Twitter.
El Museo de la Ciudad de Wolfsburgo pide objetos relacionados con momentos vividos: una baraja de cartas para pasar el tiempo, un libro de cocina para probar nuevas recetas, máscaras hechas a mano, carteles con normas de higiene o vídeos de gente cantando o aplaudiendo en los balcones.
El Museo Regional de Frisia Oriental, en el estado federado de Baja Sajonia, también organizará una exposición antes de que la pandemia de coronavirus pase a ser historia, y ya está coleccionando objetos que simbolizan la vida diaria bajo restricciones sociales.
«Estos podrían ser, por ejemplo, mascarillas de diseño original o contribuciones creativas de viviencias durante el aislamiento domiciliario, así como carteles escritos a mano colocados en los edificios de apartamentos», explica Wolfgang Jahn, director del museo, y añade: «La creatividad es sin duda tan infecciosa como el covid-19».
Jahn especifica que la exposición también podría contener objetos tales como fotos de mascarillas hechas en casa o de bolsas que alguien ha utilizado para hacerle las compras a su vecino.
El museo también quiere responder a las preguntas: ¿Cómo es el día a día escolar desde casa? ¿Cómo aprovechan los niños su tiempo libre? ¿Y qué juegos han sido rediseñados para adaptarse a la situación actual?
La exposición incluirá archivos digitales: «Los músicos están grabando conciertos en las salas de sus casas y publicándolos en Internet, los bailarines están actuando frente a la cámara de un teléfono móvil», explicó un portavoz del museo.
Las fotos y relatos describiendo la vida cotidiana durante la cuarentena se pueden enviar al museo por correo electrónico.