La industria turística egipcia, uno de los motores del país, ingresó apenas 500 millones de dólares en el primer trimestre de 2016, muy lejos de los 1.500 millones logrados en el mismo periodo del año pasado, según ha informado un responsable del Ministerio de turismo en declaraciones a Reuters.
La inestabilidad política tras el fin del régimen del presidente Hosni Mubarak en 2011 ha caído drásticamente el número de visitantes y el pasado mes de octubre 224 personas murieron al estrellarse un avión ruso en la región del Sinaí en un atentado terrorista. Tampoco ayuda la reciente muerte bajo torturas de un estudiante italiano.
En 2010 visitaron el país 14,7 millones de turistas y lo hicieron 9,8 millones en 2011, pero en el primer trimestre de 2016 solo viajaron a Egipto 1,2 millones de turistas. En el primer trimestre de 2015 fueron 2,2 millones, ha explicado el asesor económico del Ministerio Adla Ragab.
El Gobierno egipcio espera incrementar hasta los 12 millones el flujo de turistas anuales a finales de 2017, datos de un plan que incluye un aumento de la actividad en el exterior de la aerolínea estatal EgyptAir, según explicaba recientemente el ministro de Turismo, Yehia Rashed, en una entrevista con Reuters.