Además de en una inconfundible seña de identidad, la frondosa melena rizosa de Ella Eyre ha terminado por convertirse en una pesada carga para ella debido a la titánica tarea que le supone peinarse cada día.
«Si tengo un buen día, puede que tarde una hora y media en peinarme. Pero como mi pelo esté teniendo un día rebelde, entonces puede llegar a llevarme dos o tres», aseguró la intérprete a la agencia BANG Showbiz.
Así que no es de extrañar que la artista haya decidido recurrir directamente a la ayuda de profesionales para lidiar con su indómita cabellera en sus momentos de mayor estrés profesional.
«Mi peluquero me acompaña durante las giras. Ahora mismo mi pelo ha adquirido tal volumen que si quiero que esté medianamente presentable tengo que recurrir a refuerzos», añadió.
Pero pese a las incomodidades y la inmensa cantidad de tiempo que sus rizos le hacen gastar, Ella jamás sería capaz de deshacerse de su ya característica melena porque a estas alturas de su carrera la considera ya una parte integral de su identidad artística.
«Es una parte integral de quien soy como artista, forma parte de mis actuaciones en vivo porque tengo un estilo y una manera de moverme en el escenario bastante minimalistas. No creo que fuese capaz de afeitarme la cabeza, sinceramente, sobre todo porque es tan rizado que tardaría mucho tiempo en volver a crecer y eso me rompería el corazón», concluyó.
Fuente: Bang Showbiz