De los 8979 niños de entre 0 y 14 años, cifra de la Pirámide de Población del municipio de Avilés, hay más de un 20% que aún no han hecho una visita a la consulta del dentista.
Estos son los datos que manejan los profesionales que se dedican a la odontopediatría, una especialidad poco conocida de la odontología que busca mejorar la calidad de la salud bucodental de los más pequeños.
Según los expertos, un niño debería ir por primera vez a consulta de un dentista infantil con apenas un año para valorar cómo está empezando a desarrollar su dentición, aunque sea provisional, y poder darle un seguimiento.
A partir de ahí, las revisiones anuales deberían ser una constante para poder ayudarles a evitar un mal hábito en la mordida, en el crecimiento de las piezas de leche, que concluye aproximadamente a los 4 años o incluso en el espacio para el futuro desarrollo de los dientes definitivos.
¿Por qué tan temprano?
Porque según la tendencia, cada vez son más los menores con caries.
Esta dolencia, que antes se presentaba durante la adolescencia, ha bajado su edad hasta encontrarse con menores de cuatro años que, como consecuencia del biberón, de la bollería o de las chucherías, han dañado las piezas dentales provisionales y podría incluso hacer que no se desarrollaran de forma normal las definitivas.
La cifra se incrementa si se incluye la etapa escolar, donde entre un 60 y un 90% de los niños han tenido una caries.
Conseguir desde edad temprana una correcta salud bucodental permite que los jóvenes puedan conseguir evitar problemas futuros que al final repercuten en muchos otros campos que hasta ahora no eran tan visibles.
Al igual que las revisiones con los pediatras se llevan a rajatabla, acudir al odontopediatra puede suponer una diferencia en el desarrollo de la dentición, del espacio interdental, de la mejora de la mordida e incluso problemas respiratorios. Algunas maloclusiones severas podrían solventarse sin necesidad de tratamientos mucho más agresivos más adelante y evitando también problemas en el desarrollo de las estructuras óseas.
¿Qué es un dentista infantil?
Pese a que muchos pueden tener cierta reticencia a llevar a los más pequeños a cualquier consulta, la figura profesional del dentista infantil habilita espacios mucho más agradables para hacer de la experiencia algo agradable.
Son especialistas en la salud bucodental de los niños desde su nacimiento a su adolescencia, con lo que siguen su desarrollo desde una edad temprana para evitar apiñamiento, caries o incluso problemas mayores que necesitarían, de no ser tratados a tiempo, una intervención quirúrgica en la edad adulta.
Espacios diseñados para los más pequeños, un ambiente mucho más distendido, tratamientos acordes con las necesidades específicas y, sobre todo, una especialidad realizada tras la carrera de odontología avala a estos profesionales en el cuidado no solo de la salud bucal sino también en los consejos que pueden dar en términos de nutrición, dietética e incluso hábitos a seguir para prevenir futuros problemas dentales.