Las drogas son un tema que genera mucha controversia y polémica. El eterno debate sobre la legalización de algunas de ellas divide a muchos países. Los defensores afirman que con esta medida lo que se conseguiría es regularizar el consumo, mientras que los contrarios hablan de que no se puede legalizar algo que a todas luces es perjudicial para la salud.
La legalización de las drogas o de la prostitución son debates muy profundos que obligan a una reflexión muy seria, pues hace que nos cuestionemos hasta dónde llegan las libertades individuales y sociales.
Existen argumentos de todo tipo, y uno de los más sonados es: si ya existen drogas legalizadas con las que los gobiernos obtienen ingentes cantidades de dinero en concepto de impuestos, hablamos del alcohol o el tabaco, ¿por qué no hacer lo propio con algunas drogas, al menos las consideradas blandas?
En muchos países el consumo de marihuana para fines terapéuticos e incluso lúdicos está permitido. En España, en cambio, aunque se han dado pasos para su legalización, todavía está prohibido. Esta situación resulta muy paradójica, pues en Holanda, donde la marihuana está legalizada, el consumo es menor que en nuestro país, tanto en términos absolutos (normal al ser España un país mucho más grande) y en términos relativos.
Frecuentemente estos debates saltan a la escena política y social, cada vez que se producen noticias como las que ahora comentamos. En la Fuente de la noticia podemos ver cómo en Colombia, una universidad propuso hace unos años un curso para aprender a cultivar marihuana.
¿Por qué aprender a cultivar marihuana desde la Universidad?
El Departamento de Agronomía de la sede de Bogotá se justifica, estos conocimientos no tienen por objetivo fomentar el consumo de esta planta, sino mostrar técnicas que pueden resultar beneficiosas para el conjunto de la sociedad.
No cabe duda de que el cannabis, además de propiedades psicotrópicas, destaca por sus propiedades terapéuticas, y ahí reside la finalidad de este curso. En Colombia, el cannabis medicinal y científico sí está legalizado.
La marihunana medicinal, y también cosmética
Colombia, Israel, Holanda, Alemania, Uruguay, algunos estados de Estados Unidos… todos estos son países o territorios donde la marihuana ha pasado ese filtro de ser una droga a ser una planta con otros usos, entre ellos el medicinal y científico, y también el cosmético.
El curso que proponen desde esta universidad colombiana dotará a los estudiantes de fundamentos básicos para dominar el cuidado y crecimiento de las plantas y las claves para cultivar esta planta en casa.
Con 40 horas de duración, en estos estudios se imparten tanto conocimientos teóricos como prácticos. Aunque esté demonizada por muchos, el cannabis posee propiedades muy relevantes para tratar ciertas dolencias o enfermedades crónicas y puede servir como agente anti inflamatorio, anti bacteriano, anti viral y analgésico.
En su vertiente más cosmética, algunos aceites derivados del cannabis presentan beneficios para la piel, la hidratan y la regeneran y alivian varices, piernas cansas y algunas alergias.
Un debate que seguirá estando presente
En los últimos 15 ó 20 años, las asociaciones prolegalización de la marihuana, las empresas del sector y muchos particulares han conseguido alcanzar muchas metas, pero la realidad es que la legalización del cannabis y el permiso para usar la planta con fines medicinales sigue estando muy vetada en muchos países del mundo.
España, que en materia de derechos civiles y sociales destaca por ser uno de los territorios más avanzados del mundo, sigue manteniendo una legislación muy restrictiva con este tema.
Los defensores de la legalización del cultivo de cannabis ven una contradicción en que España, uno de los principales consumidores de hachis y marihuana del mundo y con territorios como el Estrecho de Gibraltar, por donde entran enormes cantidades de droga cada año, no legisle o debata con seriedad sobre estos temas.
El curso sobre cómo cultivar marihuana en Colombia es solo una anécdota más, o debe ser considerado como tal, especialmente teniendo en cuenta que en el país sudamericano el consumo de cannabis terapéutico está permitido.
La raíz del debate es mucho más profunda, ¿estamos preparados como sociedad para enfrentarnos a un debate serio sobre la legalización de todas o algunas de las drogas de consumo habitual?