Los spas han formado parte de nuestra vida desde hace cientos de años. Algunas personas incluso sitúan sus orígenes a la época romana. Sin embargo, no todo el mundo conoce los beneficios de ir a un spa periódicamente. Y es que, aunque parezca un lujo innecesario, ir a un spa ayuda a prevenir y sanar dolencias musculares, hidrata la piel, disminuye el estrés, el cansancio y también el insomnio.
Por esto, si vives en Barcelona, y te gustaría conocer el mejor Spa en Barcelona, no puedes dejar de visitar “Slow Spa”, un centro de masajes y tratamientos de relajación y belleza para el cuerpo y la mente que te harán sentirte renovado y te ayudarán a desconectarte de cualquier preocupación.
Además, a continuación, te mencionaremos una serie de beneficios que te aportará para tu salud el hecho de acudir a “Slow Spa”.
Ventajas físicas
Los spas ofrecen un sinfín de ventajas a corto plazo, sobre todo a nivel físico. Algunas de las más importantes son las siguientes: mitigan el dolor muscular y de las articulaciones, previenen el cansancio y el insomnio, aumentan la flexibilidad de los músculos, ayudan a sanar las contracturas musculares y cervicales, activan la circulación sanguínea, estimulan el sistema inmunológico, aceleran el metabolismo, evitan la hipertensión, hidratan la piel y evitan problemas en la dermis, tienen efectos antinflamatorios, mejoran la respiración y combaten los problemas respiratorios, favorecen la digestión y favorecen también el funcionamiento del sistema digestivo.
Todas estas mejoras se consiguen a través de la hidroterapia, pero si a ello le sumamos algún tratamiento más específico como un masaje o un baño termal los beneficios serán todavía mayores, ya que están más focalizados.
Ventajas a nivel psicológico
Es una de las principales causas por las que acudimos a un spa. Desde hace años, una enfermedad que merma la salud de las personas es el estrés, sin embargo, realizando una visita al spa, tendrás tiempo para ti, para centrarte en tu cuerpo y olvidarte del exterior, por lo que te sentirás más relajado.
Con los diversos tratamientos que ofrece Slow Spa se intenta conseguir que las personas se aíslen del exterior, se olviden de la rutina y se centren en su organismo. Además, si la persona consigue relajar su cuerpo, automáticamente la mente también lo hace y sus tensiones emocionales desaparecerán o por lo menos disminuirán gracias a unos días en un buen balneario.
En resumen, estos son algunos de los beneficios psicológicos que se pueden alcanzar visitando periódicamente un spa: incrementan la energía corporal y mental, combaten la ansiedad y los nervios, reducen el estrés, aumentan la autoestima, logran el equilibrio emocional y mejoran el humor.
Ventajas estéticas
En un spa podrás recibir tratamientos de manos y pies, exfoliación y limpieza facial que te dejarán con un aspecto físico más rejuvenecido. Estas son algunas de las mejoras estéticas que lograrás: frena el envejecimiento de la piel, ayuda a tonificar y a eliminar las células muertas de la dermis, la piel quedará hidratada, nutrida y con un cutis impecable y si tienes celulitis o retención de líquidos te ayudará a combatirlo.