Los coches suelen ser máquinas susceptibles a los cambios bruscos de temperatura, en especial al frío. Es por ello que durante la época de invierno aumenta significativamente el número de vehículos accidentados, bien sea por una batería estropeada o por el elevado consumo eléctrico característico de los coches modernos.
Por esa razón es fundamental revisar el sistema eléctrico, el estado de la batería y demás áreas importantes como los frenos y el limpiaparabrisas. De este modo se viajará seguro y evitará exponerse a situaciones incómodas en la vía.
Qué revisarán en estos talleres mecánicos
Realizar una inspección casera puede no ser suficiente cuando la temperatura no para de bajar, así que lo más indicado es dirigirse a un taller de coches certificado, como, por ejemplo, un taller Sevilla, donde profesionales del campo automotriz comprueben la integridad del funcionamiento del coche. Asistir a talleres mecánicos confiables ahorra tiempo y dinero, ya que las revisiones realizadas en dichos establecimientos son integrales, pues incluyen:
- Evaluación de la batería: A través de un polímetro, los técnicos cuantifican la tensión generada por la batería y su relación con el porcentaje de carga.
- Medición de los líquidos del coche: aceite, refrigerante, frenos y lavaparabrisas.
- Revisión de los limpiaparabrisas: Con ello determinan si es necesario o no reemplazar las escobillas del limpiaparabrisas.
- Inspección de neumáticos: La adecuada adherencia al asfalto es obligatoria durante los meses de invierno. En el taller verificarán presión de inflado, profundidad del dibujo de la banda y estado de la goma.
- Revisión del sistema de alumbrado: El buen funcionamiento de las luces en invierno puede ser cuestión de vida o muerte. Lo ideal es que todas enciendan sin problemas y que los haces de luz se encuentren alineados.
- Revisión del sistema de frenado: En invierno las pastillas y los discos se desgastan con gran rapidez. Por lo tanto nunca está demás una inspección experta.
Algunos consejos para mantener en buenas condiciones el coche durante el invierno
Como se mencionó anteriormente, mantener el coche en óptimas condiciones en temporada de invierno es imprescindible para sobrevivir a los estragos de la nieve y la lluvia. Pensando en ello, los expertos ofrecen una serie de sencillos consejos para conservar cualquier vehículo a punto durante el invierno.
Según el grupo de expertos, las medidas cotidianas pequeñas son las que verdaderamente hacen la diferencia. Siempre que la ocasión lo permita, hay que guardar el coche dentro del garaje, tratando de no exponerlo a las inclemencias del frío externo, dado que las heladas nocturnas son en exceso perjudiciales para la batería del vehículo, la carrocería, el líquido anticongelante y la pintura.
En caso de que no se tenga otra opción, la conducta indicada es retirar poco a poco la capa de hielo con ayuda de un rascador, evitando en todo momento el uso del agua caliente, debido a que un cambio tan brusco de temperatura podría rajar fácilmente los cristales.
Por otro lado, los mecánicos aconsejan hacer énfasis en la revisión constante y exhaustiva de los neumáticos, puesto que son el elemento que más tiende a fallar cuando la temperatura desciende, y es que tanto la lluvia, como la nieve y el hielo son fuertes enemigos de ellos, especialmente si se encuentran desgastados o si son rodados con la presión baja. De hecho, si se vive en regiones donde nieva con frecuencia y la temperatura no sube más allá de los 5º centígrados, recomiendan instalar neumáticos de invierno.
Asimismo, el líquido anticongelante es otro de los elementos protagonistas en el mantenimiento vehicular de invierno. Gracias a que tiene el poder de proteger el motor del frío extremo. Este se debe cambiar con un intervalo de dos o tres años, a no ser que se logre observar depósitos salinos o barro. En tal caso se debe que acudir al taller de coches a la brevedad posible. Asimismo, es importante no olvidar medir el aceite y comprobar su viscosidad.
El alumbrado del vehículo es también un factor a tener en cuenta cuando comienza el invierno. ¿La razón? Las horas de luz son menos que en verano, por lo que es obligatorio ver y hacerse notar en todo momento, inclusive cuando todavía haya luz de día. No olvidar que tanto la seguridad de los conductores como la seguridad de quienes lo rodean dependerá en gran medida de un correcto funcionamiento de las luces.
Como último consejo, se recomienda llevar en el maletero del coche ciertos artículos que pueden ser de gran utilidad si se llegara a presentar una emergencia. El primer objeto de la lista es un cepillo rascador de cristales, ideal para mantener los vidrios despejados. La segunda herramienta corresponde a las clásicas cadenas, imprescindibles para avanzar entre nevadas intensas, y el tercer artículo serían unos guantes gruesos para protegerse las manos del frío y también para evitar posibles daños físicos en caso de avería o si se necesita instalar urgentemente las cadenas.