(dpa) – Ya sea con una montura de esas que no pasan desapercibidas o con cristales de color pastel, las gafas de sol grandes y llamativas están de moda este año.
Quien no sea fanático de esta tendencia tendrá como alternativa otro elemento imprescindible de este verano (boreal): las denominadas micro, unas gafas de sol muy pequeñas, que más bien son un complemento de moda.
Especialmente populares son las llamativas lentes en color rosa, verde menta, azul cielo. Sobre todo los colores pastel hacen que todas las miradas se posen en este accesorio de moda tan veraniego.
También están de moda las gafas con cristales de color degradado o las que incluso cambian completamente de color.
Pero cuidado: las lentes de color pastel a veces no son adecuadas como gafas de sol cuando se conduce o en la playa, señala el óptico Giovanni Di Noto, miembro de la junta directiva de la Asociación de Ópticos y Optometristas en Alemania.
«Los tonos de las lentes marrones, grises y verdes son los que menos distorsionan los colores y protegen los ojos de forma fiable. Los lentes de color naranja también ofrecen una protección óptima contra los rayos ultravioleta», explica Di Noto.
Las gafas sin montura están de moda
Independientemente del color, la lente es en lo que todos se fijan ahora, sobre todo en casos como las gafas sin montura en versión XL.
«En el pasado, las personas que no querían usar gafas tenían como única alternativa las lentes sin montura», explica la especialista Kerstin Kruschinski, sobre este clásico entre las gafas. Sin embargo, todo eso ha cambiado y ahora están de moda las gafas sin montura, ya sea con cristales oscuros o con cristales claros.
En la actualidad, las formas de lentes realmente grandes y llamativas, como por ejemplo las de corte hexagonal, son técnicamente posibles incluso en la versión sin montura y por lo tanto están de moda.
«Estas gafas se adecúan estupendamente como gafas de sol, porque son súper ligeras y súper elegantes», asegura Kruschinski. Incluso las lentes grandes en las que el borde superior forma una línea recta, se presentan este verano con media montura o sin ninguna.
Las gafas de sol muy pequeñas son más bien un artículo de moda
Pero las gafas no siempre tienen que ser grandes. Las denominadas gafas de sol micro son unas lentes de sol diminutas que se han impuesto en la calle, sobre todo como complemento de moda. A menudo se puede ver que descansan sobre la mitad de la nariz, es decir, que se usan más bien de adorno.
Estas minigafas de sol, que en ocasiones emplea lentes de color y cuenta con poca superficie de lente, apenas sirven realmente como protección contra el sol y los peligrosos rayos ultravioleta.
«Las gafas de sol deben ser siempre lo suficientemente grandes para evitar que los dañinos rayos ultravioleta lleguen al ojo», apunta Di Noto, quien señala además que los rayos ultravioleta pueden causar una dolorosa inflamación en la córnea, conjuntivitis o incluso daños permanentes en la retina.
«Las lentes de protección solar óptimas filtran tantas longitudes de onda de luz como sea posible por debajo de los 400 nanómetros», agrega.
«Si las gafas sólo se oscurecen, pero no filtran los rayos ultravioleta es aún más perjudicial para los ojos que no usar ningún tipo de lente», afirma la estilista de moda Valeriya Licht.
Por norma general, las gafas de sol que se pueden comprar en la Unión Europea están todas certificadas con el distintivo «CE», un certificado expedido por las autoridades europeas que asegura que las gafas tienen suficiente protección contra los rayos UVA.
La protección también puede estar de moda
Para todos aquellos para los que las gafas de sol no son solo un complemento, sino que buscan protección para la vista, hay otras tendencias.
Independientemente de la forma de las gafas, «los estampados grandes y atrevidos» están a la orden del día, afirma Kruschinski. El estilo de imitación del mármol en la montura es particularmente popular, pero los grabados retro también vuelven continuamente.
Con o sin diseño, grandes o pequeñas, las gafas de sol deben coincidir con la cara. Según Kruschinski, las personas con una cara más pequeña también pueden usar gafas de sol grandes.
A menudo se trata tan solo de elegir una montura L o XL y no directamente la versión XXL, que resulta demasiado grande. El consejo de Kruschinski: si los lentes chocan con las mejillas al sonreír, lo más probable es que las gafas sean demasiado grandes.
Según Di Noto, por norma general, «si la cara es más bien angular, se recomiendan gafas redondas u ovaladas». Mientras que a las caras redondas les viene mejor unas gafas cuadradas, agrega. «Y la gente con un rostro ovalado lo tienen más fácil, pues pueden usar sin problemas casi cualquier forma de gafas si las proporciones son correctas», concluye el especialista.
Por Jennifer Weese (dpa)