La reforma del hogar toma fuerza en estos momentos y se presenta como solución alternativa y eficaz al problema de la compra de viviendas, que se ha visto afectada principalmente por la subida del Euribor y de manera paralela los intereses en los préstamos personales e hipotecas. La parte de los ahorros destinada a financiar la compra se ha desviado finalmente hacia la reforma, pues si no podemos tener una casa nueva, al menos pondremos la nuestra a nuestro gusto.
Como la moda, el diseño de interiores, materiales, mobiliario, acabados y todo lo relacionado con la reforma ha ido modelándose a lo largo de estos años y ha culminado con las tendencias actuales, que marcan la línea del buen gusto según los criterios del momento. Y a colación con esto, hoy nos hemos propuestos mostrar las novedades y tendencias actuales para a reforma de los baños y a cocina. Para avalar nuestro criterio hemos contactado con la empresa Reformas Reiteman Madrid, cuyos profesionales manejan la actualidad con pericia.
Si quieres que tu reforma quede como una de esas fotos que salen en las revistas de hogar, no te pierdas este artículo y sigue nuestros consejos.
Para el baño
La decoración de los baños ha tomado en los últimos años ciertos derroteros vanguardistas que han creado tendencia y cuya línea se ha venido siguiendo casi sin discutirla. Solerías, cerámicas, estructuras complejas y vanguardistas para los revestimientos… El interiorismo evoluciona casi de forma bienal, por lo que el verdadero éxito de una reforma está en saber captar las tendencias sin que estas pasen de moda en un plazo de 2 años como máximo.
Los acabados lisos forman parte activa de los diseños actuales y aseguran una vida útil (estéticamente hablando) bastante prolongada. Difícilmente quedarán anticuados. Apostar por azulejos de gran formato, escayola lisa o microcementos pulidos y rebajados será una garantía de que el paso de los años no eclipsará la belleza de nuestro baño y su renovación dentro de las tendencias del interiorismo. Y si realmente estamos convencidos de que esta idea es la que más se asemeja a nuestro gusto, entonces nada le vendrá mejor que el uso de tonos suaves como el blanco, el beige, el gris o los propios colores terrosos que han invadido con tanta fuerza la estética de este tipo de estancias.
También en el plano de los revestimientos, las piedras y los mármoles no han pasado de moda desde que comenzaron a usarse ni aparentemente pasarán, por lo que siempre es un acierto optar por ellos para las paredes de nuestro baño. No obstante, es cierto que las tendencias actuales apuestan por incluirlos en zonas concretas, como la encimera de los lavabos, las paredes de la ducha y alguna que otra zona más. De este modo estaremos consiguiendo un acabado elegante sin incurrir en la sensación de sobrecarga que pueda menoscabar el efecto deseado.
Y si después de aceptar esta propuesta queremos un toque moderno más arriesgado, siempre podemos imprimir ese carácter con los elementos como la grifería, los espejos, las estanterías… Complementos de cambio fácil y que no supondrán un desembolso económico tan vasto como el de una reforma integral.
Para la cocina
Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de reformar nuestra cocina es que lo más importante no es el resultado estético, sino la funcionalidad de la que la hayamos dotado. En otras palabras: la eficacia de la distribución es crucial. ¿Quiere esto decir que debemos renunciar a la estética? En absoluto. El interiorismo actual sabe combinar ambos aspectos de un modo eficiente y equilibrado.
En cuanto a la distribución, la apertura de la cocina a otras estancias de la casa, como el salón, sigue siendo tendencia. Especialmente en los espacios pequeños este recurso dota al espacio aprovechable de una sensación de amplitud que nos hará olvidar las dimensiones reales de nuestra casa. Para quienes no terminan de convencerse de esta unión, las separaciones transparentes mediante cristal o metacrilato han tomado fuerza en lugar de los tabiques de siempre. De este modo se consigue conectar ambos espacios proporcionando a cada uno su propia intimidad y aprovechando la distribución lumínica de ambos.
Con respecto a la estructura propia, la isla central rodeada del resto de elementos continúa liderando las opciones, ya que proporciona amplitud, funcionalidad y un espacio aprovechable para comer o trabajar en caso de que no podamos destinar un rincón a esta función en concreto. Unos bancos altos alrededor serán la opción más destacable.
Por último, las maderas y mármoles con acabados lisos y suaves no dejan de liderar la estética de las cocinas y cuentan con la ventaja de que son moda permanente. Para reforzar estos elementos, los tonos terrosos no sólo están de plena actualidad, sino que permitirán aprovechar la suavidad de los materiales y dotar a nuestra cocina de una sensación acogedora constante.