Estudiar con música clásica, música en la sala de espera de un dentista, también en una tienda cuando se entra a comprar ropa, música a la hora de comer en los establecimientos de comida rápida, también en las disciplinas deportivas y clases colectivas… Sin duda, el ser humano está acostumbrado a descargar las mejores melodías de cualquier del listado de páginas para escuchar música online que hay en la red.
Con la revolución que supuso la llegada de las plataformas de streaming para el sector, Spotify se llevó la palma y consiguió una nueva manera de entender la forma de consumir las novedades y clásicos.
A través de un clic, un mundo de posibilidades se abre en forma de listas, descargas offline e incluso la forma de reproducción cambia hasta hacerse a la carta.
¿Qué ventaja tienen las plataformas de música online?
La primera es la variedad de contenido. Ya no hace falta limitarse a dos o tres nombres o estilos, todo está volcado en ellas y la industria ha sabido sacarle el máximo partido.
Gracias a suscripciones con costes bastante asequibles hoy en día se puede escuchar música desde cualquier dispositivo.
No hace falta llevar uno exclusivo que reproduzca música, sino que, desde el móvil, la Tablet, el pc o incluso los dispositivos de IA como el GoogleChrome o el último de Amazon, Alexa, se puede estar conectado de forma permanente a cualquier artista, formato y sonido.
En este sentido, y para poder ahorrar megas de las conexiones cuando no se está en wifi, cada vez son más las páginas que permiten crear listas para descargarlas en los dispositivos y poder escucharlo offline. Como pasara en otros tipos de plataformas de contenidos multimedia, esta opción permite además no gastar más consumo de la cuenta y seguir utilizando las principales plataformas.
Entre sus ventajas, el ahorro pasa a ser el principal detonante. Gracias a este tipo de plataformas, por menos de lo que cuesta un cd hay acceso a increíbles listados de artistas, estilos y formatos.
¿Qué ver para decidirse por una página u otra de música?
Lo primero que hay que ver es, en realidad, el uso que se le va a dar. Conectarse a un Spotify o a un Apple Music suele ser lo más habitual, pero no hay que olvidarse de otras opciones como Tidal – propiedad de Jay Z, marido consorte de Beyoncé – que tiene una calidad alta de sonido o Youtube Music, sin olvidar la opción de Amazon.
Depende de cada usuario, la calidad de sonido puede ser determinante para decantarse por uno u otro, pero también la capacidad de poder elegir en catálogos más amplios, en ciertos dispositivos. Tanto es así, que la venta de música se ha visto sobrepasada. Hasta tres veces más se consume el streaming frente a la venta de los clásicos formatos.
En cifras, casi un 75% de los ingresos llegaron a través de la suma de las plataformas frente a la compra tradicional. Esto está haciendo que discográficas, artistas y consumidores vivan una auténtica nueva revolución para consumir acordes.