(dpa) – Se supone que revolucionarán el mercado: los «foldables», es decir, los móviles plegables parecen perfectos, fascinantes, justo lo que uno necesitaba. ¿Cuántas veces hemos querido hacer búsquedas o escribir en el móvil y la pantalla no nos alcanza? Pues bien, esta podría ser una gran solución. Los primeros móviles plegables ya fueron presentados a principios de 2019. Sin embargo, habrá que armarse un poquito de paciencia hasta que podamos tener uno en nuestras manos, porque todavía quedan algunos inconvenientes por resolver.
Lo genial de este nuevo diseño es que las pantallas plegables permiten incorporar una superficie visual mucho mayor que la de un móvil normal, con lo cual, cuando están desplegadas, tienen el tamaño de una tableta, y cuando están cerradas tienen el tamaño de un display común.
La nueva era estará marcada por Huawei Mate X y Samsung Galaxy Fold. Son las dos marcas que tienen previsto salir con este producto al mercado por algo más de 2.000 euros (unos 2.200 dólares). De todos modos, paciencia, porque si bien se están volcando enormes esfuerzos para pasar del prototipo a la producción en serie, el paso no es tan sencillo.
Samsung quería lanzarlo al mercado en abril de 2019, pero pospuso la salida cuando vio que varios usuarios que los estaban probando tuvieron problemas con la bisagra del mecanismo de plegado. Huawei también creyó más conveniente pasar para después la fecha, originalmente prevista para julio de 2019.
Los diseños y apuestas de ambas marcas son bastante diferentes. Samsung Fold propone una pantalla de 7,3 pulgadas que se pliega hacia adentro y cuenta con otra pantalla en la cara externa. La desventaja: entre las dos superficies plegadas queda una grieta. El modelo de Huawei, en cambio, se pliega hacia afuera. La desventaja en este caso es que la pantalla queda totalmente expuesta, sin ninguna protección.
Christian Just, de una revista especializada, lo resumen realzando lo importante que es que «los fabricantes ofrezcan bisagras resistentes y un film que recubra muy bien la pantalla OLED para evitar que los usuarios se vean rápidamente frustrados».
Pero no sólo falta trabajar en cuestiones de hardware. «El software debe ser perfecto para operar en ambos estados: desplegado y cerrado», apunta Just. Se supone que el nuevo Android 10 ofrecerá una versión para plegables a través de una continuidad de pantalla (Screen Continuity). Por ejemplo, si en la pantalla pequeña estamos viendo un video en pantalla completa y desplegamos el sistema, el video continuará corriendo en la resolución correcta en la superficie mayor.
William Tian, director del área de consumidor de Huawei en Alemania, resume los desafíos de este nuevo producto diciendo que la mayor dificultad estuvo en «encontrar una solución que permitiera que el dispositivo pasara del estado ‘cerrado’ al estado ‘desplegado’ sin que sufra daños». Además, Android también debió ser adaptado a las «foldables».
Pese a estas dificultades iniciales, Just cree que el producto tiene buenas oportunidades en el mercado. Puede ser ideal, sobre todo porque es innegable que «iniciamos muchas búsquedas en el móvil, pero de pronto la pantalla nos resulta demasiado pequeña para leer documentos, ver bien algunas fotos, mapas o videos de cierta duración». ¡A esperar entonces ansiosos los plegables!
Por Sven-Hendrik Hahn (dpa)