Meliá Hotels International ha cifrado en 28,6 millones de euros el deterioro de sus activos en Puerto Rico por la situación que vive el país durante el primer trimestre de 2015, un deterioro de valor que no comporta «una salida de caja», pero que afectó negativamente a sus resultados.
Dicha valoración, realizada en junio de 2015, por Jones Lang Lasalle figura en el informe anual de gobierno corporativo remitido por la cadena a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía de la familia Escarrer explica que la situación económica del país está dificultando encontrar agentes activos interesados en su adquisición, por lo que el grupo hotelero ha realizado una nueva valoración de los activos y pasivos enajenables, mantenidos para la venta.
Meliá Hotels International cuenta en Puerto Rico con un nuestro resort de cuatro estrellas de lujo en la isla, ubicado la costa noreste en Coco Beach, el Gran Meliá Puerto Rico Golf Resort.
La inestabilidad en el norte de África, la situación política en Grecia, los atentados terroristas de París y la creciente amenaza del denominado Estado Islámico, figuran entre los riesgos identificados por la compañía, que siguen afectando de forma negativa en las zonas donde se materializan y el grupo tiene presencia.
No obstante, a excepción de estos riesgos la compañía mallorquina asegura que ningún otro riesgo ha tenido un impacto relevante durante 2015.
«En todo caso, los sistemas de detección y valoración de riesgos de la compañía han permitido identificar y valorar los riesgos que amenazan el cumplimiento de los objetivos empresariales con la suficiente antelación para establecer las medidas oportunas para mitigar o atenuar el efecto de los riesgos», señala en su informe anual corporativo.