Düsseldorf (Alemania), 28 dic (dpa) – Los consumidores alemanes se muestran dispuestos a gastar bastante dinero en champán y vinos espumantes, revela un estudio de la empresa de investigación de mercado Nielsen.
En los últimos 12 meses y sólo en los comercios de productos alimenticios y las droguerías, los alemanes compraron alrededor de 311 millones de botellas de vinos espumosos y gastaron más de 1.200 millones de euros en ellas, según los datos de Nielsen. La demanda de champán, cava, prosecco, ‘sekt’ (vino espumoso alemán) marca su pico más alto en las celebraciones navideñas.
«El ‘sekt’ seco es el preferido por los alemanes», afirmó Christiane Stuck, experta en bebidas de la empresa Nielsen. Pero existen notables diferencias regionales en las preferencias, aclaró.
Mientras que en el este de Alemania se prefieren los vinos espumosos semisecos, los consumidores en el sur y en el sudoeste del país se decantan más por los secos (brut) o los extra secos (extra dry), explicó.
Los germanos parecen, sin embargo, haber perdido un poco el gusto por los espumantes. Cuantitativamente las ventas de los mismos disminuyeron entre noviembre de 2017 y finales de octubre de 2018 en un 3,5 por ciento en comparación con el año precedente. En dinero, la merma fue del 2,5 por ciento, señaló Stuck.
Según los analistas de mercado, cada persona compró durante el año pasado casi cuatro botellas de champán, sekt, cava, prosecco, asti o crémant -una de ellas en las fiestas navideñas- y gastó en total cerca de 15 euros.