La directora general de Tráfico, María Seguí, ha defendido la nueva normativa que entra en vigor este jueves 1 de octubre y que obliga a los menores de hasta 1,35 centímetro a viajar en el asiento de atrás. A su juicio, «el fin que se persigue es dar la posición y el tipo de protección más óptima para los niños», recuperando «la importancia de ir en el asiento de atrás» que, estadísticamente, es «la mejor ubicación para los niños» en un accidente.
Durante su participación en el Salón de la Movilidad Segura y Sostenible (Trafic 2015), Seguí ha insistido en que, en cualquier caso, un cambio de la normativa «es marginal» comparado con la «imperiosa necesidad de utilizar los Sistemas de Retención Infantil (SRI)».
En este sentido, ha recordado que, desgraciadamente, con el antiguo reglamento había adultos que «no llevaban a sus niños debidamente retenidos» y, en su opinión, ahí es donde está «el problema más grande». Además, ha apuntado que aún se encuentran con niños víctimas de algún accidente que «no iban haciendo uso de ningún dispositivo de seguridad».
«Así que el primer mensaje es: pongan ustedes a sus niños en los sistemas pertinentes para su altura, para su peso, para su seguridad», ha concluido.