El Gobierno español ha recibido con «hondo pesar» la noticia de la catástrofe sufrida por el avión de la compañía Egyptair y se ha ofrecido para ayudar a investigar las causas del siniestro.
En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, el Ejecutivo español ha trasladado su sincera condolencia a los familiares y allegados de las víctimas y a los pueblos y a las autoridades de Egipto, de Francia y de todos los demás países cuyos nacionales han sido víctimas de este siniestro.
«El Gobierno espera que la investigación sobre las causas del siniestro pueda avanzar rápidamente y ofrece todo su apoyo en este sentido», concluye la nota.
Un A320 de la compañía EgyptAir se ha estrellado en el mar este jueves de madrugada por razones desconocidas cerca de la isla griega de Kárpatos.
Egipto encabezará la comisión que analizará lo ocurrido, de la que también formará parte Francia, país fabricante del avión y segundo con mayor número de víctimas. Otros países como Grecia también se han ofrecido a colaborar en la investigación.
La Junta Nacional de Seguridad del Transporte estadounidense (NTSB, por sus siglas en inglés) también ha ofrecido su ayuda para «lo que sea necesario», según ha confirmado un portavoz a la agencia Reuters. Estados Unidos podría colaborar en la medida en que los motores proceden de un consorcio liderado por una firma norteamericana.
La comisión de investigación tendrá entre sus primeros cometidos la búsqueda y análisis de las cajas negras, así como la recogida de pruebas una vez se hayan encontrado los restos de la aeronave, en la que viajaban un total de 66 personas, entre pasaje y tripulación. La Fiscalía egipcia también ha ordenado la apertura de una investigación sobre este incidente.