Bruselas, 1 sep (dpa) – La Unión Europea (UE) introduce a partir de hoy un nuevo método de medición para todos los vehículos nuevos con el fin de lograr unos valores más fiables de las emisiones contaminantes y el consumo.
Dos pruebas asegurarán unos niveles de emisión más fiables y contribuirán a recuperar la confianza en los nuevos vehículos: una prueba de laboratorio mejorada («World Harmonised Light Vehicle Test Procedure» – WLTP) así como una prueba en condiciones reales de conducción («Real Driving Emissions» – RDE).
Desde septiembre de 2017 ambas pruebas eran obligatorias para los nuevos modelos de coche pero ahora se amplían a todos los vehículos nuevos.
Desde el comienzo del escándalo de las emisiones se han endurecido notablemente las reglas del juego, dijo la comisaria europea de Mercado Interior e Industria, Elżbieta Bieńkowska. «Las pruebas de emisiones más estrictas son un elemento clave del puzzle», añadió.
La nueva normativa WLTP se diferencia en muchos puntos de la anterior, por ejemplo, las pruebas de laboratorio duran diez minutos más. Además, la duración total del ciclo simula con 23,25 kilómetros un recorrido de más del doble de largo que el ciclo de homologación de consumos y autonomía europeo (NEDC).
La velocidad máxima se sitúa en 131 kilómetros por hora en vez de en 120. El NEDC se utilizaba desde principios de los años 90.