A la hora de alquilar un vehículo, son muchas las cosas que tenemos que tener en cuenta: el precio del alquiler, el tiempo que necesitamos el coche, el lugar desde el que queremos alquilarlo, el tipo de coche que estamos buscando, etc. Una serie de cuestiones que sin duda alguna van a marcar la diferencia entre las distintas opciones que tengamos e incluso, en la gran mayoría de los casos, van a ser el elemento decisivo a la hora de elegir un determinado alquiler.
De hecho, el precio de los alquileres de coche (a menudo desorbitado para la mayoría de los bolsillos) suele ser el factor clave para tomar una decisión e incluso la causa por la que muchas personas nunca han alquilado un coche a pesar de poderle sacarle mucho partido a uno. Un precio que ha hecho que se creen nuevas alternativas y nuevas formas de alquilar para dar una respuesta real a todos esos usuarios que sabían que otra forma de alquiler era posible, como es el caso de Drivy. Un servicio de alquiler de coches entre particulares que ha supuesto un antes y un después en el sector del alquiler y que sin duda alguna ha sido el recurso que muchas personas buscaban. No solo por el hecho de que ya es posible alquilar un coche a un precio mucho más económico sino porque supone una nueva forma de entender el uso de los vehículos, haciendo mucho más sostenible y efectivo tener un coche en propiedad, entre otros motivos porque tendremos la opción de ponerlo en alquiler cuando no lo estemos usando.
Es decir, con Drivy no solo tendrán ventajas todas aquellas personas que desean alquilar un coche sino también todos aquellos conductores que debido a su ritmo de vida no usan el coche a diario y por el contrario ven cómo se queda aparcado durante días y semanas sin moverse. De esta manera, con Drivy podremos rentabilizar al máximo nuestro coche a la vez que otros usuarios disfrutan de un alquiler con el que todas las partes salen ganando.
No obstante, y a pesar de que sin duda esta característica es toda una ventaja, esta plataforma tiene mucho más que ofrecernos. Entre otros, el hecho de contar con coches de alquiler en las diferentes ciudades de España que sin duda hará mucho más fácil encontrar un coche que se adapte a nuestras necesidades. Por ejemplo, el servicio de Drivy en Asturias será una muy buena opción para descubrir todos los paisajes y los parajes de una de las Comunidades Autónomas más bonitas de España y que sin duda cuenta con lugares a los que solo podremos acceder si tenemos un coche a nuestra disposición. O bien el hecho de que una vez que nos hayamos creado una cuenta de usuario, ya podremos realizar todas las gestiones que necesitemos desde ahí, teniendo la seguridad de que vamos a recibir toda la información que necesitemos en todo momento y que vamos a disfrutar de todas las ventajas de este servicio.
En ese sentido, a la hora de alquilar un vehículo, podremos optar por dos opciones diferentes. Por un lado, el alquiler de coches con reserva inmediata (un nuevo servicio de Drivy con el que no será necesario esperar a la confirmación de nuestra solicitud sino que directamente podremos disfrutar del coche el día que lo necesitemos) y, por otro lado, el alquiler habitual. Un alquiler para el que será necesario enviar una solicitud de alquiler al propietario del vehículo que nos haya interesado y cuya respuesta tendremos que esperar (podremos enviar más de una solicitud y así tendremos más posibilidades de recibir antes una respuesta) antes de comenzar a disfrutar del coche elegido.
En cualquiera de los casos, la forma de dar con el vehículo que necesitamos será igual de sencilla dado que gracias al buscador de la página web podremos personalizar al máximo nuestra búsqueda, indicando las fechas del alquiler, el presupuesto que tenemos, etc. tras lo cual aparecerán los diferentes resultados a nuestra disposición.
Tras esto, y una vez hayamos recibido la respuesta afirmativa en el caso del alquiler normal, quedaremos con el dueño del vehículo para hacer la entrega del coche y de las llaves así como para firmar el contrato con el que dará inicio el alquiler (y donde aparecerán todas las especificaciones del mismo) y ya habremos completado el proceso.Por último, cuando haya terminado el periodo de alquiler, la devolución será tan sencilla como hemos explicado antes, quedando de nuevo con el propietario y firmando en este caso el contrato que pone fin al alquiler y donde se ajustará el precio final del mismo (en función de los kilómetros recorridos y del combustible consumido).