Lucir lo mejor de ti no tiene porqué significar siempre hacer un gran desembolso o pasar por dolorosos tratamientos de belleza. El acierto dependerá de que sepas elegir bien, y por eso, queremos poner nuestro granito de arena y traerte algunos consejos para que estés a la última sin que se note mucho en tu bolsillo.
Elige tu limpiador facial con cuidado
Si eres de las que usa normalmente el agua y el jabón como método para limpiar tu cara, deberías reconsiderar tu estrategia. Estudios dermatológicos han demostrado que para tener una piel suave lo mejor es utilizar un limpiador que no sea muy agresivo y en cantidades moderadas.
Seguro que alguna vez te has preguntado como quitar las espinillas de la frente o como quitar las espinillas y el acné del resto de la cara. Para que sea lo más efectivo posible aconsejamos utilizar mascarillas antes de iros a la cama, de esta forma conseguirás tener la piel como las modelos de las revistas.
También tienes que tener en cuenta que lavarte la cara con demasiada frecuencia (más de dos veces al día) acabará siendo perjudicial para ti, ya que puede hacer que dañes tu barrera lipídica natural. Es un manto protector que mantiene tu piel lubricada para que se vea saludable.
Cuando esta barrera se destruye, la piel se vuelve seca y, además de parecer vieja y poco saludable, puede producir picor o escozor. Lava tu cara una o dos veces al día y utiliza un limpiador elegido sabiamente.
Periódicamente, tampoco está de más usar un exfoliante para limpiar y eliminar las células muertas de tu piel. Si no quieres gastar dinero en una, te dejamos una receta natural para que puedas hacerla en casa usando aceite de coco.
El aceite de coco es una excepcional base para un exfoliante ya que se derrite al momento de contactar con el cuerpo. Para exfoliar tu cara, basta con mezclarlo con azúcar moreno y realizar masajes en forma circular con cuidado de no ser demasiado agresivo con la piel. Después del masaje, enjuaga bien tu cara.
Acabar con el vello corporal sin salir de casa
La guerra contra el pelo del cuerpo no es nada nuevo, existen pruebas de que ya en Egipto, tanto hombres como mujeres, usaban algunas cremas y ceras naturales para lograr una piel libre de vellos. Con el paso del tiempo, las distintas técnicas se han ido depurando y ya es posible pasar por este trance sin salir de casa.
Sea invierno o verano, mantener la piel libre de pelos es una de nuestras principales preocupaciones, por lo que las tecnologías han sabido centrarse en solucionarlas con varias herramientas. La última en aparecer en el mercado ha sido la luz pulsada.
Este sistema aplica pulsaciones de luz sobre la raíz del vello, debilitándolo y evitando su crecimiento de forma natural. Si repites este tratamiento en intervalos de cuatro a seis semanas, estarás evitando la aparición del vello y podrás lucir una piel más suave de forma duradera, incluso en áreas más sensibles como la cara.
Otras opciones más tradicionales para depilarte en casa siguen siendo la cera o usando las mejores depiladoras electricas. Si este último es tu caso, te recomendamos que eches un ojo a la página depiladoras.es donde podrás encontrar las mejores ofertas en depiladoras eléctricas.
En el caso de que uses la cera, te recomendamos que prepares bien la zona que vayas a depilarte antes de empezar. Debe estar limpia de rastros de cremas o aceites corporales ya que estos impiden que la cera se agarre a la piel y que el vello salga a la primera. La mejor hora para hacerlo será por la noche, después de una buena ducha, ya que el agua caliente abre los poros de tu piel.
Si vas a depilarte las piernas, el truco está en empezar desde la parte inferior de la rodilla y bajar hasta el tobillo. Aplica la tira de cera de arriba abajo, en dirección al crecimiento del vello. Para depilar la rodilla, no olvides mantenerla doblada y aplicar cera en pequeñas bandas.
Después de quitar la cera, presiona la piel inmediatamente para aliviar la zona y evita rascarte, ya que puedes producirte heridas en la zona sensible. Aplica agua fría en abundancia si sientes la necesidad de rascarte y sentirás alivio inmediato.
“¡No tengo nada que ponerme!”
Una frase muy usada, aunque no del todo cierta. Todos solemos tener un fondo de armario olvidado que pasó de moda o que simplemente te pusiste una vez y no te gustó cómo te quedaba. Te damos algunos trucos y consejos para que le des una segunda oportunidad a estas prendas y puedan volver al cajón de las favoritas.
- Entérate de las tendencias que se llevan, puedes mantenerte informada en la guía de moda mujer o en cualquier revista. Puedes fijarte en las famosas que tengan un cierto parecido físico a ti y coger ideas de los modelos que llevan en las fotografías.
- Con nuevas ideas en tu cabeza después de ver fotos, vuelve a tu armario y saca las prendas olvidadas. Dedica tiempo a mezclarlas entre ellas y a buscar una combinación de colores que te guste, esas viejas prendas pasarán a formar parte de tu nuevo look. Atrévete a ponerte esa falda larga como un minivestido, minifaldas como tops…
- Busca en el armario de tu madre o incluso en el de tu abuela, ya sabes como es esto de la moda y el vintage. Recuerda también que el look masculino y el oversize están de moda.
- Si con toda esta búsqueda, se te ha quedado ropa amontonada que crees que no vale para nada, puedes jugar a transformarla, nunca se sabe si podemos crear una segunda vida para una prenda. Prueba a añadir broches, a estampar dibujos de una camiseta a otra…
Como puedes observar, con estos tres fáciles consejos podrás sacar lo mejor de ti y de tu vestimenta sin tener porqué hacer un gran desembolso económico. Empieza a probar estos trucos y olvidarás que existían esos tratamientos caros o que no tienes fondo de armario.