Es realmente una experiencia excepcional ver como tus cultivos de flores y hortalizas crecen de forma rápida y saludable durante la primavera. La temperatura es la adecuada y el ambiente es apto para el desarrollo de las plantas. No obstante, en la medida que se va acercando el verano y las temperaturas comienzan a aumentar, te verás en la necesidad de empezar a regar tus plantaciones con intervalos de tiempo mucho más breves, lo que supone más trabajo y gasto de recursos como el agua y la energía. Para evitar excesos, te recomendamos que utilices una malla de sombra para cultivos, de esta manera podrás mantener a tus plantas en un “refugio”, asegurando que crezcan sanas y confortablemente.
¿Qué es una malla sombra?
Es una tela desarrollada para brindarle protección a las plantas de las fuertes temperaturas que puedan darse en ciertos ambientes. Tiene diversas aplicaciones dentro y fuera de la agricultura tales como: uso doméstico, horticultura, comercios, industrias, bodegas, deportes, ganaderías y áreas recreativas.
Durante el verano (que es la temporada más calurosa) esta herramienta se utiliza para las estructuras o invernaderos, pues permite bajar la temperatura de las plantas, conservando la humedad del suelo. Es importante mantener a las plantas jóvenes protegidas del impacto directo del sol para que puedan desarrollarse de la manera indicada, para ello aficionados, agricultores, viveristas, jardineros y horticultores utilizan mallas de sombra, puesto que es su mejor opción.
Además de disminuir la intensidad lumínica de los rayos del sol, la función de esta mala sombra es la de reducir el delta térmico (día-noche), para evitar cambios repentinos de temperatura que afecten a las plantas creándoles un shock térmico, ayudando así a mantener cierta humedad en el ambiente entre la tela y el suelo.
De igual forma, puede utilizarse para proteger el ganado, las mascotas y hasta a nosotros mismos de los fuertes y dañinos rayos del sol.
¿De qué material está hecha las mallas sombras?
Estas mallas pueden estar fabricadas en distintos materiales como polietileno, polipropileno y poliéster. También se pueden encontrar un sistema aluminizado (lúcido metálico) que permite crear mayor refección y un resultado de luz disipada debajo de la tela.
Para que puedas obtener la sombra que deseas, debes tener en cuenta el porcentaje de sombra que proporciona cada malla, ya que puede variar mucho dependiendo del color que tengan. Puede ser tenue de 5% (en mallas transparente o de color blanco) y llegar hasta un 95% en los tejidos espesos de color negro.
Cabe decir que todas las mallas sombras son impermeables al agua, por lo que la lluvia o el riego por aspersión no serían un problema, facilitando mantener a tus plantas bien hidratadas.
Tipo de mallas sombras
En general, existen dos tipos de mallas sombras: la tela anudada conocida como raschel y la tela que es tejida con el sistema de trama y urdimbre, que en su mayoría se fabrica con monofilamentos, aunque también puede encontrarse fabricado con rafia.
Malla tipo Raschel
Este tipo de malla se fabrica con polietileno estabilizado contra los rayo UV, siendo una opción económica para casas sombra, invernaderos y viveros. Es un material resistente al deshilachado en caso de que ocurran cortes accidentales. Asimismo, se puede considerar decorativa, ya que se presenta en variados colores y mezclas muy llamativas, por lo que pueden funcionar perfectamente en estacionamientos, jardines, patios, restaurantes, entre otros lugares.
Este tipo de tejido cuenta con una estructura abierta que la hace resistente a daños por el viento, reduciendo su velocidad dentro de la estructura y disminuyendo la intrusión del calor. Cuenta con una estructura fácil de instalar y que puede modelarse y cortarse según la medida que se necesite. Además, no necesita bastilla perimetral, aun cuando esta permite tensionar el producto de mejor manera. Es resistente a agroquímicos y detergentes, para que puedas utilizarla sin preocupaciones.
Malla sombra tejida
Especialmente conocida como malla sombra tejida, este tipo de tela viene fabricada con trama y urdido y son tejidas con monohilo de polietileno estabilizado con antioxidantes que la protegen contra los rayos del sol.
Siendo una malla de consideración profesional, posee con un peso mayor a la mala raschel, contando con grados y porcentajes de sombra similares. Sin embargo, este tipo de tejido si requiere de una bastilla perimetral y una buena costura que evite que la tela se deshilache. Se trata de un tejido mucho más rígido, por lo que su estiramiento adicional es mucho menor que en el tipo de malla raschel. De igual forma, este tipo de tela de sombreado cuenta con una resistencia mayor, por lo que puede durar muchos años bajo el sol y soportar agentes químicos agrícolas, sin sufrir daños.
Protección del cultivo
Bien seas un agricultor profesional o uno aficionado, proteger tus plantas siempre será lo primero, para ello debes establecer tus necesidades y adquirir un tipo de malla sombreadora que se adapte adecuadamente a ellas.