
(dpa) – El Avensis es un modelo de clase media de Toyota que se dejó de fabricar en 2018, por lo que solo es posible encontrarlo en el mercado de coches usados.
A pesar de ello, el Avensis es un modelo a tener en cuenta, a tenor de los resultados obtenidos durante las inspecciones técnicas de vehículos. La primera generación del Avensis salió al mercado en 1997, mientras que la tercera y última estuvo en producción entre 2009 y 2018.
Se realizaron algunas modificaciones en 2011 y 2015, destacando en la última la incorporación de una función de freno de emergencia autónomo. El tercer Toyota Avensis disponía de versiones familiar y sedán, y ésta última se dejó de producir en 2017, antes que la familiar.
Es versátil, compacto y seguro en la carretera. Su chasis suave proporciona un progreso cómodo. El volumen de almacenamiento hace posibles las salidas familiares y las vacaciones sin problemas de espacio. Toyota no es tacaño con los sistemas de asistencia y seguridad.
Los airbags delanteros, laterales y el de rodilla para el conductor eran de serie. Según el informe «Auto Bild Tüv Report 2019» no hay casi nada negativo que pueda consignarse en una inspección técnica.
En el chasis solo hay faltas menores en la suspensión de los ejes de los vehículos de cinco y siete años de antigüedad. Apenas hay objeciones, incluso sobre los componentes y funciones de los frenos. El sistema y los filtros de escape carecen prácticamente de faltas, y apenas hay pérdida de aceite.
El único problema importante es la iluminación: los faros delanteros y traseros son señalados a menudo a partir de la segunda revisión, después de cinco años. A partir de la tercera, el sistema de intermitentes se hace notar.