Sexualidad. Ese gran tabú que va cayendo, poco a poco, según van avanzando los años y la sociedad va normalizando el deseo y las fantasías como algo que todo el mundo tiene y padece.
Sin duda, hablar de sexo en pleno siglo XXI es algo de lo más normal. Atrás quedaron los años en los que no se hablaba en público o se hacía en voz baja.
Porque está claro que las relaciones de pareja son necesarias e imprescindibles para que funcionen.
Para ello, hay tres claves que pueden funcionar para devolver la chispa.
Cumplir las fantasías de la pareja
Ya sea a través de disfraces, posturas, roles o incluso imitando videos xxx, escuchar cuál sería la fantasía de la otra parte y hacerla realidad puede ser divertido, revelador e incluso puede descubrir una faceta de la pareja que no se conocía. Dejar a un lado las vergüenzas y el qué dirá y dar paso a la confianza plena es tan importante como el propio sexo disfrutado. Es cosa del pasado callar y contenerse. El truco está en la comunicación. Si se habla y pactan límites en caso de que sean experiencias más arriesgadas puede ser tan placentero como se imagina.
Salir de la rutina
Sofá, manta, palomitas y relax. ¿Por qué no cambiar la rutina de la noche de cine en casa? Nunca está de más arriesgar y día y sorprender con una de las películas porno gratis que existen. Caldea el ambiente, da ideas para dejar la imaginación volar, incita al juego de pareja y también a imitar alguna escena que se vea. De hecho, ¿por qué en casa y no en una escapada? Actualmente hay hoteles que permiten que todas las fantasías con jacuzzi, piscinas o decoración se puedan realizar por precios más que razonables. Organizar un plan de este tipo sin que la otra parte lo sepa puede acabar siendo el mejor plan de fin de semana.
Intercambio de pareja
Quitar esta barrera ha sido para muchas parejas un flotador hacia la felicidad. Más allá de querer estar con la pareja, el vivir con ella un intercambio de partner hace que la magia y la atracción vuelvan a encender la llama. La moda de los swingers se ha consolidado en algunas capitales como una alternativa más, fuera de la clandestinidad. No hay un perfil concreto de pareja que opte por este tipo de locales y opciones, con lo que no hace falta catalogarse de ninguna manera. Innovar en pareja es la clave para mantener la confianza, la chispa o la intriga al máximo y disfrutar como nunca.