(dpa) – Un coche pequeño de color rosa llama la atención inmediatamente, mientras que una gran limusina negra pasa desapercibida en el tráfico urbano. Y lo cierto es que la mayoría de automóviles salen de fábrica en negro, gris o blanco, lo más tristes.
En Alemania, un 75 por ciento de los coches nuevos son de estos tres colores, según datos de la Autoridad Federal del Automóvil.
Paolo Tumminelli, profesor de la Escuela Internacional de Diseño de Colonia, en el Oeste de Alemania, pone énfasis en la diferencia entre una tendencia de color y el parque automovilístico real.
«Los colores negros y grises siguen siendo los más vendidos. Pero los tonos tierra y arena también están muy de moda, igual que las pinturas metalizadas», dice Tumminelli.
Entre los tonos llamados incoloros, el blanco avanza durante los últimos diez años hasta convertirse en la tercera opción para coches más popular de Alemania.
Los años setenta eran más coloridos
No siempre los colores sobrios dominaron las calles. Hasta los años 70, muchos coches eran de colores vivos, como el naranja o el verde, por ejemplo. «Actualmente, dominan los colores técnicos como el gris, mientras que el verde es algo raro», dice Tumminelli, quien a la vez añade que hay fabricantes de automóviles que promueven deliberadamente colores llamativos.
Ferrari lleva décadas promocionando su rojo brillante. Mazda presenta sus nuevos modelos en rojo subido desde hace algunos años. Por eso, muchos clientes piden un Mazda de este color.
En el Mercedes Clase A, por otro lado, la mayoría de los clientes eligen el blanco polar entre los once colores disponibles, mientras que el negro obsidiana domina en la Clase S.
El color refleja la tendencia hacia la electromovilidad
Tumminelli cree que en los próximos años la tendencia será una pintura metalizada brillante, mezcla entre plata y azul azzurro. «El color refleja la tendencia hacia la movilidad eléctrica porque es un color técnico», dice. El gris y el negro seguirán siendo populares.
Los compradores de coches que quieran expresarse de manera especial tienen tonos más coloridos entre los que elegir, pero la mayoría de los clientes siguen comprando de forma conservadora.
«El coche sigue siendo una inversión seria. Los clientes dan importancia a la imagen pública: Lo que se ve en la calle o se ve en la publicidad también es una elección de compra», asegura el profesor de diseño.
Multitud de azules y sólo algún verde
Mark Gutjahr, diseñador jefe del fabricante de pinturas BASF Coatings, con sede en Münster, en el Oeste de Alemania, investiga sobre los colores de los coches del futuro. BASF es uno de los líderes en Europa y suministra a casi todos los fabricantes.
El diseñador explica que cada automotriz tiene su propia gama de colores, y actualmente hay alrededor de 700 colores diferentes en el mercado europeo.
Gutjahr asegura que ahora están de moda los colores azul y gris. Entre los colores disponibles en Europa hay 135 tonos diferentes de azul. Y esta tendencia creció fuertemente en los últimos años.
Por otro lado, el verde es un color poco solicitado, aunque con matices. Ya no es moderno tener un coche verde lima, algo agresivo, sino un verde elegante como el verde esmeralda, según Gutjahr.
El diseñador de BASF también recalca la amplia variedad que existe entre los grises, ya que ahora hay multitud de tonos diferentes.
Estética cálida en un mundo percibido como frío
Además del azul y el gris, Gutjahr también cree que el beige y el oro son tendencia. «Cuando el color cambia entre gris y beige, puede parecer muy elegante», dice.
En su opinión, los colores más cálidos aumentarán su presencia en los próximos años. «Mucha gente anhela una estética más cálida en un mundo percibido como demasiado frío», explica.
También la gama de grises será más cálida en el futuro debido a la tendencia que sustituye el verde por el rojo en sus tonalidades. «El plateado disminuye frente a ella, ya que representa una tecnología anticuada, como de la década de 2000», dice Gutjahr.
«Ya nadie quiere eso», prosigue, para explicar que mientras que hace 15 años la proporción de plateados superaba el 30 por ciento, hoy solo alcanza el 10 por ciento.
Por Fabian Hoberg (dpa)