La aerolínea rusa Kogalymavia ha achacado este lunes a «actividades externas» el siniestro de uno de sus aviones en la península del Sinaí se debió a «actividades externas», si bien fuentes de la comisión investigadora egipcia han descartado que el avión fuera alcanzado desde el exterior.
«La única explicación razonable es que se debiera a actividades externas», ha indicado el director general de la compañía, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
Por su parte, el subdirector general de la compañía, Alexander Smirnov, ha recalcado que el siniestro no pudo deberse a errores técnicos o humanos, resaltando que debía ser resultado de «otras acciones técnicas o físicas».
«El avión estaba en excelentes condiciones. Descartamos un fallo técnico o cualquier error por parte de la tripulación», ha remachado.
Este mismo lunes, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha afirmado que por el momento no se puede descartar ninguna teoría sobre las causas del siniestro, tras ser preguntado sobre si podría haberse tratado de un atentado terrorista.
Sin embargo, fuentes del comité de investigación han manifestado que los análisis de las cajas negras revelan que el piloto no hizo una llamada de emergencia antes de desaparecer del radar, según ha informado la agencia británica de noticias Reuters.
INVESTIGACIÓN EXHAUSTIVA.
El primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, ha reclamado una investigación exhaustiva en torno al incidente, afirmando que «la tarea clave es investigar en detalle qué causó la tragedia», tal y como ha recogido la cadena de televisión Rossiya 24.
Un A321 de la compañía aérea rusa Kogalimavia que volaba a San Petersburgo con 224 personas a bordo –la mayoría de ellas de nacionalidad rusa– se estrelló en la península egipcia de Sinaí, por causas que aún se están investigando.
A primera hora de este lunes han llegado al aeropuerto de San Petersburgo los restos mortales de 144 víctimas del accidente aéreo, según ha confirmado a la agencia oficial de noticias rusa Ria Novosti un portavoz de Emergencias.
Los restos mortales de estas primeras víctimas repatriadas serán trasladados este mismo lunes a un morgue de San Petersburgo, donde se procederá a su identificación.