(dpa) – Pueden armarse para vegetarianos o para carnívoros, pueden ser una comida fuerte o un snack, pueden ser picantes o livianos… ¡los wraps son un mundo de posibilidades! Si los sabes variar, nunca te aburrirás. Además, se preparan rápido y pueden comerse fríos o calientes. ¿Que más pedir?
Cada variante lleva un nombre diferente, dependiendo de su origen. Están los burritos, las fajitas, las enchiladas. Todas remiten a la cocina mexicana, igual que los tacos, que llevan un corte en el medio y se siven al plato.
La gran ventaja de muchas de estas opciones es que la masa también se puede comprar preparada en el supermercado. Para los wraps o los burritos, suelen venderse pliegos de masa en forma de panqueques listos para envolver todas las verduras y carnes que te apetezcan. En el caso de los tacos, también se puede comprar la masa en muchas tiendas.
A la hora de armar el relleno, hay que saber que las recetas originales mexicanas no suelen ser vegetarianas. Llevan bastante carne de vaca o de cerdo, y se les añade frijoles, maíz y, por lo general, alguna salsa como el guacamole.
Pero si tienes otras costumbres alimenticias, puedes crear variaciones de este formato superpráctico y armar por ejemplo un burrito de calabaza. Para prepararlo, corta dados de calabaza y ponlos al horno con ajo y aceite de oliva. Luego añádeles arroz hervido, cheddar rallado, frijoles negros, comino y….¡listo y riquísimo!
En algunos países se venden las tortillas para los tacos hechas a base de harina de maíz o de trigo. Las primeras tienen un sabor más intenso. Las segundas, un sabor más parecido al pan.
Ben Fordham tiene algunos restaurantes de tacos en Londres y México y escribió un libro dedicado a esta especialidad. Él nos recomienda preparar la masa en casa. Dice que con un poco de práctica no es difícil lograr una buena masa, que se hace, en su versión clásica, con harina, agua y un poco de sal. Nada más.
Si uno quiere ofrecer una alternativa al sabor clásico, también puede preparar la masa con harina de garbanzo. Además, «la harina de garbanzo contiene muchos ingredientes nutritivos. No sólo tiene un 20 por ciento de proteínas, sino además un elevado contenido de fibra», explica Steffi Sinzenich, que escribe en un blog dedicado a «cuestiones de paladar». Los garbanzos tienen otra ventaja: los pueden disfrutar las personas con intolerancia al glúten.
Para preparar la masa debes mezclar 130 gramos de harina de garbanzos, dos cucharadas de semillas de lino, una cucharadita de hierbas secas, 200 mililitros de agua, sal, pimienta, hasta obtener una masa homogénea. Déjala en reposo unos cinco minutos y luego cocina las tortillas en la sartén.
Lo que es importantísimo es no fracasar en el momento de armar los rollitos. Independiente de qué tipo de harina hayas tomado para preparar la masa, puede que esta parte de la receta no sea la más sencilla y que el relleno se te escape por las puntas.
Para evitarlo, intenta colocar los ingredientes del relleno en forma compacta, como si fuese una línea. Luego cierra el panqueque por encima de la mezcla, cierra las puntas abiertas y enróllalo lo más apretado posible.
Por lo general se arman mejor si no utilizas demasiados ingredientes. Las verduras no tan blandas y la carne le dan una buena consistencia al relleno. Y no hay que tener miedo de colocar demasiado relleno. Eso, muy por el contrario, suele darles a los wraps mayor estabilidad.
Por Julia Felicitas Allmann (dpa)