Londres, 25 mar (EFE).- El príncipe Enrique, nieto de la reina Isabel II, y su novia, Cressida Bonas, pasaron unos días de vacaciones en un lujoso complejo de esquí en Kazajistán, según reveló hoy el tabloide británico «The Sun».
La pareja viajó en un avión privado a la exrepública soviética, y después un helicóptero gubernamental les trasladó hasta una estación de esquí donde se alojaron en un chalet de lujo para pasar unas vacaciones, de acuerdo con el rotativo.
Un portavoz de la Familia Real, no obstante, no quiso hacer ningún comentario al respecto.
Enrique, de 29 años, y Cressida, de 25, son expertos en la práctica de este deporte de invierno, según el tabloide.
A principios de marzo, Cressida acompañó al príncipe Enrique a un evento de una organización benéfica en el estadio londinense de Wembley, lo que se consideró como la primera ocasión en que la novia del príncipe le acompañaba a un acto oficial.
Según los medios británicos, la pareja se conoció en mayo de 2012 cuando fueron presentados por la princesa Eugenia, hija del príncipe Andrés y muy amiga de Cressida.
Desde entonces, ambos han sido vistos en varias ocasiones en público y en octubre de 2013, siempre según la prensa, pasaron un fin de semana en la residencia real de Sandringham (sureste de Inglaterra).