La Costa do Sol, en el litoral del Estado de Río de Janeiro en Brasil, ofrece varios destinos idílicos como Arraial do Cabo, Búzios, Cabo Frio y Rio das Ostras como destinos idílicos a visitar durante los Juegos Olímpicos que se celebrarán el próximo mes de agosto.
Arraial do Cabo es la capital del buceo de Rio de Janeiro. Con más de 50 puntos de buceo no muy lejos de la costa y con una rica vida marina, Arraial do Cabo es el lugar ideal para la práctica de este deporte.
En estas aguas los visitantes podrán ver tortugas, estrellas y caballitos de mar, además de una infinidad de corales y peces coloridos. Además, aquellos buceadores más experimentados pueden visitar las decenas de grutas acuáticas y deslumbrarse con los navíos naufragados del siglo XIX.
El municipio disfruta de un clima ideal para disfrutar con la familia, siendo la Playa de Anjos la que más movimiento tiene de la ciudad. Como buena aldea de pescadores ofrece delicias gastronómicas basadas fundamentalmente en pescado y marisco. También se puede visitar el Pontal do Atalaia y asistir a la puesta de sol sobre la ciudad.
Reconocido internacionalmente, Búzios es uno de los lugares más visitados de Rio de Janeiro. Una antigua aldea de pescadores que saltó a la fama tras la visita de la estrella francesa Brigitte Bardot. Sus 23 playas son una visita obligatoria para quienes viajen a Brasil para las Olimpiadas.
Para aquellos visitantes activos, Geribá, Ferradura, Ferradurinha, João Fernandes, Azeda y Azedinha son las playas más recomendadas para paseos y para la práctica de deportes acuáticos. Para aquellos que estén buscando opciones más tranquilas Praia do Forno, Praia da Foca, Praia dos Amores, Poças das Tartarugas y Praia da Tartaruga son las más recomendadas.
PLAYAS Y DUNAS DE ARENA BLANCA
A dos horas de la capital del Rio de Janeiro se encuentra Cabo Frio, una ciudad moderna desarrollada sobre un lugar histórico de Brasil, famosa también por sus playas y dunas de arena blanca. El Forte de São Matheus, construido en 1620 por los portugueses, es uno de los monumentos más icónicos de la ciudad. El Convento Nossa Senhora dos Anjos es, por su lado, uno de los ejemplos más precisos de la arquitectura colonial brasileña.
Los amantes de sol y playa no pueden dejar de visitar las playas Peró, Praia das Conchas, Brava, Dunas, Foguete y la principal: Praia do Forte, en el centro de la ciudad. Una ruta por las calles de Cabo Frio se perfila como una parada indispensable de viaje. Rua dos Biquínis, una de las más transitadas, es el punto de venta de moda de baño más importante del país.
La ruta termina en Rio das Ostras, la unión perfecta entre campo y ciudad. Aquí los visitantes encuentran playas con aguas en calma e ideales para baños, pero también playas perfectas para la práctica del surf. La ciudad cuenta con museos, ferias de artesanía, bares y restaurantes.
Para quien quiera adentrarse en la naturaleza brasileña, existen variadas opciones, pero destacan el Circuito Eco-Rural de Rio das Ostras y el Parque Natural Municipal de los Pasaros.
El primero reúne campo, montañas y lagos a lo largo de decenas de propiedades rurales; el segundo es un refugio para aves en vías de extinción, donde los visitantes pueden observar algunas de las especies más raras del planeta.