El kebab tiene raíces profundas en la historia culinaria del medio oriente y ha evolucionado a lo largo de siglos para llegar a lo que conocemos hoy. Comenzó como una especialidad para las élites en Persia, pero su popularidad ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un plato accesible y querido en todo el mundo. Esta versatilidad y sencillez han sido clave en su expansión global. Hoy en día, salir por Barcelona y disfrutar de un kebab es algo habitual, y la oferta refleja tanto la historia como la innovación de este plato.
El papel del imperio otomano en la expansión del kebab
La técnica de asado en pinchos fue popularizada por el imperio otomano, especialmente en Turquía, donde se perfeccionó el sish kebab. Esta técnica evolucionó y se adaptó a nuevos ingredientes y estilos a medida que el kebab se expandía a otras regiones, enriqueciendo la cocina local. La expansión del imperio otomano permitió que el kebab se integrara en diferentes cocinas y adquiriera sabores únicos en cada lugar donde se asentaba.
El döner en Europa: una historia de integración
Alemania fue uno de los primeros países europeos en adoptar el döner kebab, especialmente en Berlín, donde se popularizó en los años 70 gracias a la comunidad turca. Allí, el döner kebab se convirtió en una opción rápida y accesible, que se ajustaba a la vida moderna y al ritmo de la ciudad. Con el tiempo, el döner se expandió a toda Europa, y en ciudades como Barcelona, salir a buscar un döner es algo que se ha convertido en un clásico de la comida urbana.
Diversidad de estilos en diferentes culturas
El kebab ha adoptado diferentes variantes en función de las culturas que lo han acogido. En Grecia, el gyros se prepara con carne de cerdo y se sirve con yogur y pepino, mientras que en el Líbano, el shawarma destaca por su mezcla de especias como el comino. Esta variedad cultural permite que el kebab sea un plato versátil y adaptable, ofreciendo algo para cada tipo de paladar y respetando las tradiciones locales.
De la calle a la alta cocina: la reinvención del kebab
Hoy, el kebab ha encontrado su lugar en la alta cocina, con chefs que reinventan este clásico en presentaciones sofisticadas. En ciudades como Barcelona, estos kebabs gourmet combinan ingredientes tradicionales con técnicas modernas, logrando una experiencia culinaria única. La transición del kebab a la alta gastronomía muestra su capacidad para adaptarse sin perder su esencia, ganándose un lugar incluso en los restaurantes de prestigio.